Carlos Slim: las tres propuestas del magnate para combatir la pobreza en México

No es ninguna sorpresa el saber que el empresario más rico de México es Carlos Slim, dueño de empresas de gran renombre como América Móvil, Grupo Carso, Grupo Condumex y Telmex. El magnate mexicano de ascendencia libanesa, nacido un 28 de enero de 1940, ha sabido por qué rumbo llevar sus negocios, lo que incluso lo ha llevado a ser nombrado la persona más acaudalada del mundo, de 2010 a 2013, superando a otros magnates como Bill Gates, dueño de Microsoft.

Actualmente, Slim cuenta con una fortuna de USD 81 mil 200 millones, según el último listado de la revista estadounidense especializada en temas financieros Forbes, dado a conocer hace unas semanas, y se encuentra en la posición 13 entre las personas más acaudaladas del mundo.

Esto quiere decir que, a comparación de hace un año, Slim logró aumentar su fortuna de una manera significativa, además de que logró escalar un par de puestos entre los más acaudalados del mundo. Y es que en 2021, Forbes dio a conocer que la fortuna del magnate era de USD 55 mil 930 millones, y se encontraba en la posición 15.

Slim, por su experiencia y conocimiento, sabe cómo administrar los recursos y tiene nociones de la manera en la que podría terminarse la pobreza en el país. Esto lo ha dado a conocer en varias de las conferencias y ponencias que ha dado el empresario, pues en ellas ha hecho propuestas para erradicarla.

En su participación, hace unos años, en el Women´s Forum, que se llevó a cabo en la Ciudad de México, el multimillonario mexicano hablo sobre la propuesta que ya había planteado anteriormente, sobre una semana laboral de tres días, con jornadas de trabajo más largas para que las personas tengan más tiempo libre.

“Desarrollarán nuevas actividades económicas de turismo, cultura y educación y le abriría el campo a otras personas para que trabajaran. Los gobiernos en lugar de estar quebrados los retirarían hasta los 75″, dijo en aquella ocasión, sobre la iniciativa de semanas más cortas.

Además, dio otras tres propuestas:

Slim dijo que la Ciudad de México ya es una urbe de servicios que no tiene que tener industrias, por lo que se debe tener excelencia en la educación, salud, entretenimiento y cultura. “Volverla una ciudad con un gran dinamismo y que se hagan minicolonias, barrios, clústers, miniciudades”, dijo en aquella ocasión el empresario.

Puso como ejemplo la colonia Doctores, en el centro de la capital, en donde se encuentran hospitales públicos y juzgados. “(Debemos) buscar que todos los que trabajen ahí, vivan ahí, tengan sus familias, lugares donde divertirse, dónde tener escuelas”, explicó.

También recordó que hay personas que gastan una o dos horas de transporte, y lo que ganan, lo gastan en pasaje. “Habría empleo, sería una renovación de la ciudad y no necesita dinero público”, dijo, y por ello señaló que basta con que se haga una zonificación que sería viable con dinero bancario.

“Estamos haciendo algo parecido en donde está nuevo Polanco en el que ha funcionado muy bien, pero nos falta más vivienda media y media baja para que mucha gente que trabaje ahí no tenga que desplazarse tanto tiempo”, explicó.

El magnate mexicano señaló que el modelo actual de las universidades es dogmático, por lo que se les debe dar a las personas, ya sea en la sierra tarahumara o en Oaxaca, las mismas oportunidades que tienen quienes se encuentran en grandes ciudades del mundo, como Boston o Nueva York.

“Sería importante que las universidades empiecen no solo a darle grado a los que se inscriben y asisten, sino tener programas de calificación de conocimiento de las personas y que les puedan dar un grado, aunque no hayan estado inscritas”, explicó.

Por ello, señaló que es necesario que la población esté conectada y que se generen contenidos culturales y educativos que sean gratuitos para quienes se conectan a consumirlos. “Necesita conectividad hacer contenidos de calidad, educativos, culturales y que se les reconozca el estudio”, apuntó.

El magnate dijo que los recursos fiscales que se recauden se deben utilizar para crear una red mínima de protección. “Para mantener una especie de red social mínima de bienestar, que no haya nadie que no tenga posibilidades de salud o alimentación a la madre durante el embarazo”.

Señaló que la pobreza solo puede combatirse con empleo y educación, pues cuando las personas están más preparadas “tienen más posibilidades de encontrar trabajo, no solo para cargar bultos, si no tienen conocimientos de computación, manejo del inglés”.

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