La Secretaría de Gobernación (Segob) acusó al Poder Judicial de la Federación de obstaculizar el caso que lleve a la justicia por la desaparición de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, pues dos integrantes del grupo criminal los Tilos fueron eximidos por un juez.
“La acusación contra ‘Los Tilos’ está sustentada en evidencia sólida, sin embargo, el Poder Judicial de la Federación impide el acceso a la verdad y la justicia de las víctimas”, denunció la Segob en un comunicado.
Aunque los dos supuestos criminales siguen detenidos, la dependencia federal consideró que no se valoró la solidez de las evidencias obtenidas por la vía legal.
De acuerdo con la Segob, se notificó el auto de conclusión del asunto contra los dos sujetos, por lo cual no se les procesó por delitos de delincuencia organizada.
No obstante que seguirán en prisión, porque se les investiga por la desaparición de los normalistas ocurrida en Iguala, Guerrero, la noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014, desde que se desconoce el paradero de los jóvenes.
Enrique Beltrán Santes, juez segundo de Distrito de Procesos Penales Federales del Estado de México, consideró que los acusados ya habían sido juzgados por el mismo delito imputado nuevamente por la Unidad Especializada de la Fiscalía General de la República (FGR).
Por ello, la autoridad judicial valoró que no podían ser procesados otra vez. De ahí que Alejandro Encinas, presidente de la Comisión Presidencial para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa, acusó que ello entorpece los esfuerzos para dar con el paradero de los jóvenes.
El juzgador no considera que en su momento su puesta en libertad ocurrió por falta de elementos, no porque se resolvió en definitiva el asunto
La Segob insistió en que la judicialización de este caso estuvo sustentada con pruebas fehacientes presentadas por la unidad de la FGR. Pero Beltrán Santes simplemente desechó lo aportado.
Alejandro Encinas añadió que estas decisiones siguen frenando los resultados de las investigaciones, pues la línea principal es resolver la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, así como llevar ante la justicia a quienes resulten responsables.
No se precisaron quiénes eran los eximidos por delincuencia organizada de parte de los Tilos, pero cabe destacar que en enero pasado fue detenido nuevamente Mateo Benítez Palacios, el Gordo, supuesto sicario de Guerreros Unidos, por su presunto nexo en la desaparición de los normalistas.
Tras una nueva declaración de un testigo colaborador de la Fiscalía General de la República, se le volvió a girar orden de arresto en su contra y cayó en el municipio de Iguala, junto con dos personas más, tras un llamado a líneas de emergencia, así como informes de inteligencia, con los cuales se supo de un comando de sujetos armados en la colonia los Doctores.
Y apenas el 3 de mayo pasado fue detenido su hermano, Salvador Benítez Palacios, considerado como uno de los líderes de los Tilos, los Peques y/o los Osos. A este sujeto lo detuvieron en la colonia Jardínes de Cuernavaca, en el municipio del mismo nombre perteneciente al estado de Morelos.
Actualmente era identificado como miembro de una red de extorsión y secuestro en Guerrero. El operativo fue encabezado por el Centro Nacional Inteligencia, en colaboración con la Policía Federal Ministerial.
Los Benítez Palacios han sido acusados de encabezar el grupo que interceptó a los estudiantes para privarlos de la libertad al identificarlos como rivales. Juan “N”, uno de los colaboradores de las autoridades ministeriales, volvió a mencionar la intervención de la célula de los Tilos, Osos y/o Peques en mayo de 2021.
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