En Corea del Sur, los boletos para asistir este mes a la exposición “Aztecas: el pueblo que movió el sol” se agotaron el día de la apertura, el pasado 2 de mayo. La muestra prehispánica, que cuenta con 123 objetos y dos reproducciones, estará en el Museo Nacional de Corea hasta el 18 de agosto de este año.
Respecto a este logro la secretaria de Cultura del Gobierno de México Alejandra Frausto Guerrero expresó que demuestra el interés y aprecio que los extranjeros sienten por las culturas originarias mexicanas. Destacó que las piezas patrimoniales incluidas en la exhibición son un símbolo de identidad de los pueblos y elementos de gran valor para el estudio de las antiguas civilizaciones.
Al respecto, la funcionaria puntualizó: “No son piezas decorativas, representan un legado invaluable de las culturas que forman parte de nuestra historia y son muestra de la diversidad y riqueza cultural de México”. Entre las piezas que componen la colección que presenta están máscaras-cráneo, figuras del Dios de la Muerte, láminas de oro que simbolizan a la Divinidad Luna, además de artículos como caracoles, cuchillos, copas y cofres.
Cabe mencionar que la exposición ha pasado ya por diversos países además de Corea del Sur, tales como Alemania, Austria y los Países Bajos. Su llegada a Corea del Sur se dio en medio de las conmemoraciones por el 60 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre los territorios mexicano y coreano.
Frausto también felicitó por el acontecimiento a la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Embajada de México en Corea. Por medio de su cuenta de Twitter, el embajador mexicano en la República de Corea, Bruno Figueroa Fischer también celebró la noticia.
En un tuit, el funcionario expresó: “Notición. Me informó el director general del Museo Nacional de Corea, Min Byoungchan, que se acabaron todos los boletos de mayo para la exposición de Aztecas, el día de la apertura. Así el impacto en la sociedad a través de los medios.”
Mediante esta muestra historiográfica, los organizadores buscan dar a los visitantes un acercamiento a la historia, cotidianeidad, avances culturales y legado del pueblo mexica. Al mismo tiempo pretender romper con los estereotipos existentes alrededor de algunas prácticas mesoamericanas como el sacrificio humano.
Se trata de una colección con piezas pertenecientes al Museo Nacional de Antropología, el Museo del Templo Mayor y el Proyecto Templo Mayor, organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en colaboración con el Museo Linden de Stuttgart, Alemania y el Museo Etnográfico de Viena, Austria.
En su mayoría, los objetos de la colección son hallazgos recientes, procedentes de excavaciones arqueológicas emprendidas por especialistas que colaboran con el Proyecto Templo Mayor y el Programa de Arqueología Urbana.
El proyecto estuvo bajo la supervisión de los arqueólogos mexicanos Leonardo López Luján, Raúl Barrera Rodríguez y Eduardo Matos Moctezuma. Mientras que la curaduría está a cargo de una especialista extranjera, Doris Kurella, del Museo de Linden.
En México, uno de los lugares donde se puede conocer la mexica es el sitio arqueológico del Templo Mayor, donde actualmente están en marcha diversas obras de reparación. Recientemente el INAH anunció que la restauración de la Casa de las Águilas finalizará para la segunda mitad del 2022, luego de que el techo de la edificación resultara dañado por las lluvias en abril del año pasado.
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