Alerta en bastión del Cártel de Sinaloa: dos personas murieron por sobredosis de fentanilo

Las alarmas se han encendido en el bastión del Cártel de Sinaloa, pues las autoridades han registrado las dos primeras muertes por sobredosis al consumir fentanilo en Culiacán, el mortal opioide sintético que es producido en la entidad que ha servido de bastión por décadas del grupo del crimen transnacional.

Cristóbal Castañeda Camarillo, secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, confirmó que las personas eran jóvenes adultos y menores de 25 años, además, que no eran integrantes de algún grupo criminal vinculados con la producción de esta droga, cuya síntesis se ha localizado en 54 narcolaboratorios desmantelados en el estado, según datos recientes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Se trata de un precedente inédito en la contabilización oficial, pues hasta la fecha, las autoridades federales y de Sinaloa solo se habían dedicado a localizar y destruir los centros de producción de fentanilo en la zona urbana de Culiacán y más municipios, pero no se tenían datos sobre el consumo local.

Consultada por este portal, la fiscalía de la entidad no ofreció respuesta oportuna para confirmar que uno de los fallecidos fue un militar adscrito a la Guardia Nacional, de quien el 21 de marzo pasado se reportó el fallecimiento por supuesta intoxicación de un narcótico no identificado en Culiacán.

El secretario de Seguridad no descartó que entre ellos estaría el agente de la corporación, aunque tampoco contaba con los datos suficientes para afirmarlo y dejó las especulaciones entre la prensa que lo cuestionó al respecto.

De acuerdo con informes de la Sedena, así como previos reportes de Infobae, los precursores químicos para producir el fentanilo provienen del continente asiático, particularmente de China. Arriban vía marítima a los puertos mexicanos de Lázaro Cárdenas, Michoacán, además de Manzanillo, Colima, y Mazatlán, territorio dominado por el Cártel de Sinaloa.

Desde 2017, autoridades de Estados Unidos reportaron la crisis de salud pública por el incremento exponencial en muertes por sobredosis en el consumo del opioide sintético. En el primer trimestre de este 2022, los norteamericanos decomisaron 907 kilos, además de un millón de pastillas falsas. Durante 2021 fueron incautados 6 mil 803.8 kilogramos de fentanilo en el país, suficientes para matar a toda la población del territorio.

La Administración del Control de Drogas (DEA) ha reiterado diversas alertas ante la disponibilidad en el mercado negro abastecido por cárteles mexicanos, quienes mezclan la sustancia con otras dosis de cocaína o metanfetamina, así como implementado su venta en píldoras falsificadas en un esfuerzo por generar adicción y atraer compradores habituales.

Castañeda Camarillo recalcó la detención del pasado 26 de abril, cuando policías estatales dieron con un joven de 19 años en la colonia Miguel Hidalgo en Culiacán, quien comerciaba bolsas con pastillas de fentanilo. Desde entonces se habían activado las alarmas.

El Cártel de Sinaloa, al igual que el Cártel Jalisco Nueva Generación, el otro competidor en el narcotráfico internacional, son identificados por la DEA como los principales productores de esta droga en México para su envío a las calles estadounidenses.

En ese país, los Centros de Control de Enfermedades indicaron que el periodo de 12 meses concluido en octubre pasado, más de 105 mil personas murieron por sobredosis de drogas y la mayoría, 70 mil consumidores (66%), están vinculadas con opioides sintéticos como el fentanilo.

Según datos del secretario de Seguridad sinaloense, en Estados Unidos se ha valuado una pastilla del opioide en 20 dólares, aunque en Culiacán no se ha determinado el precio. El año pasado en la entidad fueron incautadas más de dos millones de píldoras.

Como analgésico, el fentanilo recetado puede disminuir el dolor, pero también puede generar adicciones o sobredosis debido a su potencia y cantidad consumida; por ejemplo, 33 kilogramos de la droga, podrían causar la muerte de más de 10 millones de personas.

La producción del opioide sintético aumentó exponencialmente en México durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, según los decomisos realizados por agentes federales que aumentaron aseguramientos 814% más de lo incautado en el periodo de Enrique Peña Nieto desde 2015.

De acuerdo con reportes oficiales presentados por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), desde diciembre de 2018 hasta el pasado 27 de abril, se han confiscado 4 mil 469 kilogramos de fentanilo. Según los cálculos del gobierno federal, esas incautaciones representan una pérdida para la delincuencia organizada de mil 787 millones de dólares en siete años y cuatro meses.

La mayoría de los decomisos de fentanilo fueron en estados del norte del país, cerca de la frontera. Sin embargo, las autoridades han interceptado cargamentos en Chiapas como en la Ciudad de México.

Antes de ese lapso, cuando gobernaba el priista Peña Nieto, solo se habían decomisado 489 kilos, es decir, poco menos de media tonelada. Lo cual se ha visto multiplicado en nueve veces, en relación con el presidente actual y a mitad de su sexenio.

El mapa establecido por las autoridades señalan que los criminales han producido o buscado el traslado por Jalisco, Querétaro, San Luis Potosí, Nuevo León, Durango, Sinaloa, Chihuahua, Coahuila, Sonora, Baja California y Baja California Sur. De ahí que la presencia se detectó en 13 estados, es decir, la mitad del territorio mexicano.

Desde el arribo López Obrador al poder, las atenciones sobre el fentanilo incrementaron año con año. En 2019 fueron 588 kilos, 247 kg más que el año anterior. Para 2020, la cifra del gobierno del tabasqueño casi se triplicó con 1.3 toneladas, mientras que en 2021 se aseguraron 2 mil 74 kilogramos más. Y en cerca de cinco meses de 2022 son 478 kilos.

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