Las fe católica dicta que era primo hermano de Jesús de Nazaret, San Judas Tadeo fue uno de los 12 discípulos y es venerado como el patrón de las causas imposibles, esto viene de la creencia de que Santa Brigida de Suecia escribió que Jesús le dijo que cuando necesitara favores difíciles acudiera a este santo.
Nació en el año 1 en Galilea y se dedicó a predicar en Asiria y Persia, donde tiempo más tarde sería martirizado y asesinado con flechas en el Ararat. El nombre Judas significa dador de alegría y Tadeo significa generoso y amable.
San Judas Tadeo suele ser representado con un medallón de Jesús debido a que ambos tenían un parecido físico sorprendente y en la vestimenta porta un atuendo blanco con verde.
Él es venerado en una de las iglesias más importantes de la Ciudad de México, el Templo de San Hipólito que se encuentra en la calle Zarco número 12 dentro de la colonia Guerrero en el Centro Histórico.
El origen de este famoso lugar data de la época de la conquista, cuando Tenochtitlan fue derrotada en 1521. Fue el capitán Hernán Cortés quien pidió construir el templo en honor a San Hipólito, un soldado del siglo II que puso su servicio para los prisioneros cristianos.
Para la década de los 50 la figura de San Judas Tadeo que se encontraba en la cúpula se restaura y fue allí cuando comenzó a tomar relevancia. No es hasta 1982 que la iglesia decide dedicarse San Judas Tadeo y a partir de ese año, cada 28 de octubre se celebra su fiesta en la inmediación.
Cada año fieles asisten al templo de San Hipólito a venerar a San Judas Tadeo, en esta gran celebración se reúnen miles de creyentes que cargan esculturas de todos los tamaños e incluso portan vestimentas en honor al santo de las causas imposibles. Un dato curisoso es que entre los devotos sobresalen varios grupos de jóvenes que rondan los 20 años.
Dentro de las creencias de los mexicanos está la de que San Juditas puede resolver cualquier problema si le rezas la siguiente oración:
“¡Oh gloriosísimo Apóstol San Judas! Siervo fiel y amigo de Jesús. El nombre del traidor que entregó a tu querido maestro en manos de sus enemigos ha sido la causa de que muchos te hayan olvidado, pero la Iglesia te honra e invoca universalmente como patrón de los casos difíciles y desesperados. Ruega por mí que soy tan miserable y haz uso, te ruego, de ese privilegio especial a ti concedido de socorrer visible y prontamente cuando casi se ha perdido toda esperanza. Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que reciba los consuelos y socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente (el problema difícil que se desea resolver) y para que bendiga a Dios contigo y con todos los escogidos por toda la eternidad. Te prometo, glorioso San Judas, acordarme siempre de este gran favor y nunca dejaré de honrarte como a mi especial y poderoso protector y hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción. Amén.”
San Judas no solo es considerado el santo de las causas imposibles, sino también a él se encomiendan policías y ladrones e incluso existe una leyenda en la que se dice que ambos hacen una tregua el 28 de cada mes para venerar a su santo.
Es sabido que en algunos barrios y colonias de escasos recursos de la Ciudad de México hay muchos jóvenes que veneran a la triada, intregada por San Judas Tadeo, Malverde y la Santa Muerte y de estos tres solo San Juditas es un santo oficial reconocido por la Iglesia católica.
SEGUIR LEYENDO: