Al oriente de la Ciudad de México, en el corazón de la alcaldía más poblada de la capital, ha prosperado un proyecto sustentable y eficiente para la ciudadanía: el Parque Cuitláhuac. Este recinto de 145 hectáreas recibió el Premio Verde 2022 en la categoría de Bosques, galardón otorgado a los proyectos que promueven la conservación de la flora silvestre, la restauración y el uso sostenible de los suelos.
Y es que la historia de este recinto cuenta mucho acerca de la gran labor que autoridades mexicanas han realizado con el paso de los años para convertir lo que anteriormente era el tiradero a cielo abierto de Santa Cruz Meyehualco -el cual durante 55 años acumuló un total de 44 mil 712 toneladas de basura- en un espacio público, digno e incluyente.
De este modo, el gobierno de la Ciudad de México realizó una inversión de 432.2 millones de pesos para la recuperación del espacio. Adicionalmente, para su transformación se realizó un profundo trabajo no sólo en cuanto a la cuestión constructiva, en donde se realizó un tratamiento especial en el suelo para estabilizarlo y poder así desplantar toda la infraestructura planeada, sino también en el aspecto social mediante un trabajo integral realizado con la suma esfuerzos del sector gobierno, de la iniciativa privada y de la comunidad.
Este espacio sustentable, forma parte del programa “Sembrando Parques” y beneficia principalmente a los habitantes del oriente de la capital, gracias al rescate del espacio público, que tiene como resultado más áreas verdes que contribuyen a la sana convivencia y la reducción de desigualdades. Dicho programa impulsado por el Gobierno de la Ciudad de México tiene la la intención de impulsar el desarrollo social, económico y ambiental en las zonas de mayor marginación de la capital mexicana.
Por ello, la construcción del Parque Cuitláhuac se perfila como un paradigma de innovación, resiliencia, economía circular y ecología que ofrece un espacio recreativo de primer nivel para la población. Posicionándose como el parque más grande del oriente de la ciudad, se pretende que con las acciones de regeneración ambiental pueda un día llegar a ser un importante pulmón para la ciudad y albergue de un ecosistema lacustre regenerado.
En la década de los 90 se llevó a cabo el primer intento por recuperar el espacio y convertirlo en un parque, no obstante, carente de visión y estudios ambientales, dicha intervención se comenzó a deteriorar poco tiempo después de su creación.
Años más tarde, el Parque Cuitláhuac se convirtió en un piloto de economía circular para la Ciudad de México pues para su edificación casi el 85% de los materiales utilizados provienen de diferentes tipos de residuos. Se utilizaron 350 mil toneladas de PET y 9 mil toneladas de plástico reciclado; paralelamente se han reutilizado 148 mil toneladas de cascajo triturado para la estabilización del suelo.
Materiales que antes se veían sólo como residuo, en el parque Cuitláhuac se convierten en un recurso primordial: el cascajo triturado remplaza tezontle y tepetate; el plástico de deshecho se recicla y emplea para la fabricación de adoquines, puentes, luminarias y otros tipos de mobiliario; las aguas residuales de la zona, se limpian en la planta de tratamiento para abastecer los humedales y utilizarla para el mismo riego del parque.
Este año, el Parque Ecológico Cuitláhuac fue nominado en la categoría de Bosques en Los Premios Verdes junto a los proyectos “Cerámica de Maikiuants”, vasijas ancestrales que empoderan mujeres en el presente, y la “La Divina Comedia del Monte”, ruta turística que mezcla el cuidado de la naturaleza y la literatura, ambas propuestas de Ecuador. No obstante, el recinto de la alcaldía Iztapalapa resultó ser el ganador de la contienda.
Los Premios Verdes surgieron en el marco de la Cumbre Internacional del Medio Ambiente (CIMA) y tuvieron su primera edición en 2013, ahí se reconoció a proyectos comprometidos con la responsabilidad socio-ambiental únicamente en Ecuador.
A partir de 2014, el evento se extendió a nivel internacional y desde 2019 iniciaron un programa para todos los inscritos y la capacitación para los 500 mejores. Actualmente, el festival ha premiado a cerca de 18 mil proyectos de Iberoamérica.
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