Benito Juárez Maza: el único hijo varón de Benito Juárez que sobrevivió a la infancia y siguió los pasos de su padre

Benito Juárez García, expresidente de México, ha sido uno de los personajes más destacados de la historia de México, más en específico, de la segunda mitad del siglo XIX.

Estuvo frente al país cuando se dio la segunda intervención francesa, que desembocó en el Segundo Imperio de México, encabezado por Maximiliano de Habsburgo y su esposa Carlota de Bélgica, de 1864 a 1867. También fue Juárez quien decidió que se debía de fusilar al emperador cuando fue capturado en el Cerro de las Campanas, en Querétaro. Además, quitó privilegios a la iglesia y la separó del Estado.

Juárez estuvo casado con Margarita Maza, quien además de ser su esposa, lo apoyó y aconsejó en los momentos difíciles de su vida. Juntos tuvieron 12 hijos: nueve mujeres y tres hombres. De éstos, tres mujeres y dos hombres murieron siendo pequeños. Debido a esto, solamente sobrevivió uno de sus hijos varones, quien llevaba por nombre Benito Juárez Maza, quien murió un día como hoy, 20 de abril, de 1912.

Juárez Maza fue un personaje polémico. Creció rodeado de mujeres, y de alguna manera, intimidado por la presencia de sus cuñados, entre ellos, Pedro Santacilia, quien fue amigo cercano de su padre. Estuvo casado con una francesa de nombre María Klerian, con quien no tuvo descendencia.

Se dice que aprovechaba el nombre de su padre para sacar provecho. Siempre firmaba como Benito Juárez, sin el Maza. Siguió los pasos de su padre, quien murió cuando contaba con 20 años, de modo que tuvo la oportunidad de vivir una temporada en Palacio Nacional y de participar en los altos honores al Benemérito de las Américas. Esto lo marco por el resto de su vida.

Luego de estudiar en Estados Unidos, durante un exilio familiar, Juárez Maza se matriculó en la Escuela Nacional Preparatoria, y al igual que su padre, tomaría la carrera de abogacía, de la que desertó.

A pesar de que Porfirio Díaz cuestionó el gobierno de Benito Juárez, a través del Plan de la Noria, siempre reconoció lo que representaba, por ello, tiempo después admitió a Juárez Maza y lo envió como diplomático en varios países de Europa: Italia, Alemania y Francia.

El hijo del expresidete también incursionó, al igual que su padre, en la masonería. Hay un par de documentos, uno en el que se le da el nombramiento a grado 13 y otro que le da el grado 32. Sin embargo, ambos son del mismo día: 16 de abril de 1893, aunque el ascenso en una logia no era inmediato, algo que hace pensar que su nombre influía en ciertos aspectos.

Aparentemente, mantuvo buenas relaciones con el presidente Porfirio Díaz, quien lo favoreció con varias concesiones en sus negocios, y como diputado tuvo un aliado. En la Cámara, fue uno de los diputados, junto con su amigo José Peón del Valle, que se negaron a aceptar la renuncia de Díaz en 1911.

Su militancia en el Partido Liberal y su cercanía con Bernardo Reyes lo fueron separando del régimen porfiriano. Esto se manifiesta en que no fue el candidato en el estado de Oaxaca, por parte de Díaz, sino que se lanzó por su cuenta desde el Partido Liberal, lo que lo llevó a perder la gubernatura, frente a su rival Emilio Pimentel.

Ya con Díaz fuera del país, cuando se exilió en Francia tras el estallido de la Revolución Mexicana, Díaz Maza lograría llegar a la gubernatura de Oaxaca, no obstante, con el conflicto armado que se vivía en el país, fue incapaz de comprender este proceso.

Murió el 20 de abril de 1912, de manera repentina e inesperada, a los 59 años de edad, en sus habitaciones en Palacio de Gobierno de Oaxaca, a causa de una aparente afección cardiaca.

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