Se acerca la votación sobre la Reforma Eléctrica impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), la cual ha sido duramente criticada por la oposición, y sumamente apoyada por los simpatizantes de la Cuarta Transformación (4T).
En el tenor de buscar la mayoría de votos en el pleno para aprobar esta modificación legislativa, los diputados del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) han realizado muchas estrategias, hasta la reprogramación de la sesión en la que se discutirá, aprobará o rechazará esta propuesta.
Además de ello, algunos integrantes del partido guinda se han manifestado en diferentes espacios para intentar convencer a la oposición a votar a favor de esta Reforma.
Patricia Armendáriz, empresaria y legisladora morenista, se sumó a estos exhortos, y por medio de su columna de opinión semanal publicada en el diario Milenio, no sólo pidió el cambio de opinión de sus rivales políticos, sino que también lanzó una advertencia.
La ex integrante del programa Shark Tank argumentó que la Reforma Eléctrica se convirtió en la “arena de su lucha” del Partido Revolucionario Institucional (PRI) por sobrevivir como organización política que intentará competir en los próximos comicios.
Asimismo, señaló que esta situación es “desafortunada” porque ha generado presión política en la coalición Morena, PT y PVEM, misma que nubla la “manifestación ideológica” del tricolor, el cual, dijo, votaría a favor de la Reforma en caso de no estar luchando por sobrevivir.
“Desafortunadamente la reforma eléctrica ha sido la arena de su lucha por sobrevivir como partido que se jugará mucho en las próximas elecciones. Y digo desafortunadamente porque esta lucha manifestada en presión política hacia nuestra coalición ha nublado la manifestación ideológica de un partido que tradicionalmente ha estado por las mayorías, objeto central de la Reforma, que de no estar tintadas sus decisiones por esta sobrevivencia estoy segura de que habría de votar a favor”, señaló Armendáriz.
Recordó que desde octubre del año pasado, cuando los diputados recibieron la propuesta presidencial, López Obrador le solicitó al PRI apegarse a sus principios, así que les recordó una famosa frase del ex presidente Adolfo López Mateos con la que advirtió los peligros de privatizar la industria eléctrica.
“Les devuelvo la energía eléctrica, que es de la exclusiva propiedad de la Nación, pero no se confíen porque en años futuros algunos malos mexicanos identificados con las peores causas del país intentarán por medios sutiles entregar de nuevo el petróleo y nuestros recursos a los inversionistas extranjeros”, es el párrafo inicial de la carta.
A pesar de este intento de persuasión, el tricolor manifestó su apoyo, pero con algunos cambios, aunque solicitó su discusión para después de las elecciones de junio, esto con el fin, denunció Patricia Armendáriz, de condicionar su apoyo a “concesiones de liderazgos estatales”.
López Obrador se rehusó y exigió a la Cámara de Diputados apresurar el paso para resolver la Reforma antes de terminar el segundo ciclo de sesiones, es decir, durante el mes de abril, hecho que alertó no sólo al PRI, sino a toda la oposición.
Por ello, decidieron presentar una contrarreforma con 12 puntos principales, los cuales fueron catalogados por la morenista como “propositivos hacia un trato justo para los más vulnerables”, así que remarcó que todos fueron aceptados porque sumaban a la propuesta del presidente.
Acusó a la oposición de intentar “negociar sobre los resultados de la consulta de revocación de mandato”, pues buscaban que no fueran tan contundentes para influir en las próximas elecciones, cosa que no pasó, pues hubo más votos que los recibidos por Fox, Calderón y Meade en sus respectivas elecciones.
En cuanto recibieron los resultados de salida, mencionó que el PRI anunció que votará en contra de la reforma, punto que minimizó, ya que afirmó para la coalición de Morena “los objetivos principales de la Reforma ya están ganados a través de los resultados de declaratoria de constitucionalidad de la Ley de Industria Eléctrica”.
Finalmente, sentenció que para ella el que resultará como perdedor será el PRI, partido que de haberse mantenido fiel a sus principios de centro izquierda, habría apoyado la Reforma y votado a favor para tener mayores oportunidades de sobrevivir.
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