Emiliano Zapata es uno de los héroes más destacados y más recordados por las y los mexicanos, no por nada el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer en su conferencia matutina del 5 de abril de 2022 que en su voto de la consulta de Revocación de Mandato escribirá la leyenda “¡Viva Zapata!”, además, el ejercicio democrático se llevará a cabo el 10 de abril, misma fecha en la que el revolucionario fue asesinado.
La casa donde creció el también llamado Caudillo del Sur se ubica en el estado de Morelos, específicamente en el poblado de Anenecuilco que se encuentra dentro del municipio de Ayala, lugar que lo vio crecer.
Este sitio alberga las ruinas de lo que alguna vez fue el hogar de Zapata. Se trata de una estructura hecha de adobe que tiempo después fue convertida en un espacio cultural para preservar la memoria del morelense.
La historia de aquel lugar se remonta años antes de la llegada de Emiliano, pues durante mucho tiempo atrás fue el techo de sus padres, Gabriel Zapata y Cleofas Salazar. No obstante, el 8 de agosto de 1879 llegaría un nuevo integrante y futuro símbolo de la historia mexicana, cabe destacar que nació en el día de “San Emiliano” y debido a que sus progenitores eran muy católicos decidieron ponerle ese nombre.
En la edificación de barro y paja creció junto a otros nueve hermanos, cinco mujeres: Romana, María de Jesús, María de la Luz, Jovita, y Matilde; y cuatro hombres: Pedro, Celso, Eufemio y Loreto. Emiliano fue el antepenúltimo en nacer.
En el texto Centenario Luctuoso de Emiliano Zapata 1919-2019 de la Cámara de Diputados se menciona que después de que culminara el conflicto armado de 1910, muchos territorios de los caudillos fueron tomados y luego abandonados, algo que sucedió con la residencia zapatista.
Durante mucho tiempo el sitio estuvo en ruinas, pues con el paso de los años, las lluvias y el sol fueron debilitando la endeble estructura. Todo cambió cuando autoridades del Gobierno federal decidieron crear en aquel terreno el Museo Casa Zapata, con el fin de recuperar las hazañas del gran personaje y contar a los habitantes datos interesantes de su vida y su trayectoria como revolucionario.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) lo fundó el 1 de agosto de 2006, los trabajos estuvieron acompañados de tareas de reconstrucción y reacondicionamiento, pues fue necesario modificar el espacio para que se pudiera convertir en un recinto cultural.
Luego del temblor que sacudió al país el 19 de septiembre de 2017, el museo quedó gravemente afectado y, de acuerdo con la Red Nacional de Información Cultural, la casa tuvo que ser “sometida a un intenso programa de restauración tras las afectaciones que sufrió por el sismo”.
Actualmente el lugar ya se encuentra en perfectas condiciones y es visitado diariamente por todo tipo de turistas que desean saber más acerca de la vida de Emiliano. En las instalaciones se exhiben objetos del caudillo, destacan sus armas, su silla de montar y su sombrero, “e incluso, la ropa con la que fue asesinado el 10 de abril de 1919; también cuenta con un aula que es sede de un centro de estudios zapatistas, auditorios al aire libre y zona de murales”.
Si se es amante de este personaje se podrá contar con la dicha de visitar su antiguo hogar. Además, se encuentra una copia del Plan de Ayala, piezas prehispánicas, coloniales y de la época de la Revolución Mexicana que fueron donadas por descendientes de los revolucionarios de la entidad.
El INAH detalla que el museo se divide en seis salas donde se muestran objetos personales de Zapata como “fotografías de su niñez, cartas y documentos. Asimismo, se proyecta un documental que narra la historia del movimiento revolucionario”. Finalmente, en la vivienda de Emiliano aún se conservan cuatro muros de adobe que el Instituto restauró a principios de 2007.
La dirección es calle Ayuntamiento 33, Anenecuilco, Morelos. Se encuentra abierto de martes a domingo en un horario de 10:00 a 17:00 horas y la entrada tiene un costo de $35 pesos, pero los domingos es totalmente gratuita.
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