Carlos Slim: los cinco consejos del magnate para que los nuevos emprendedores tengan éxito en sus negocios

El magnate ha dado a conocer, en varias ocasiones, algunas claves del éxito que le han funcionado para tener éxito en sus empresas

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Carlos Slim es la persona
Carlos Slim es la persona más acaudalada de México. FOTO: GRACIELA LÓPEZ /CUARTOSCURO.COM

Carlos Slim Helú es uno de los empresarios mexicanos más importantes del país, e incluso, del mundo. El magnate, quien tiene ascendencia libanesa, es la persona con más dinero en México, y es dueño de algunas de las empresas más importantes a nivel nacional.

Slim estudió Ingeniería Civil en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y comenzó en el mundo de los negocios desde muy pequeño, pues desde niño comenzó vendiendo dulces abajo de las escaleras de su casa, que se ubicaba en la exclusiva zona de Polanco, frente al Parque Lincoln.

El magnate tuvo una educación financiera impecable, pues desde muy pequeño su padre le enseñó que debía anotar todas sus transacciones, tanto ingresos como egresos, en una libreta, y al terminar el mes, revisaban en qué había gastado su dinero. Esto le sirvió mucho a Slim para tener una administración de su dinero idónea.

Gracias a esto, el magnate, que de 2010 a 2013 fue la persona más acaudalada del mundo, ha tenido un gran éxito en los negocios.

El magnate tiene ascendencia libanesa.
FOTO:
El magnate tiene ascendencia libanesa. FOTO: GRACIELA LÓPEZ /CUARTOSCURO.COM

Si estás iniciando algún negocio, y quieres saber los consejos de Slim para que tengas éxito en él, te mostramos algunos que el magnate ha dado para que los emprendedores tengan resultados positivos.

Mantener la austeridad en tiempos de vacas gordas

Con esta frase, el magnate se refiere a que, en los momentos en que la economía es buena, hay que mantener los pies en la tierra, y no derrochar dinero. De esta manera, en tiempos malos no hará falta hacer dramáticos cambios ni se sufrirá por dinero.

Personal en activo desarrollo

Slim considera como un motivo de éxito que el personal de sus empresas, sean personas activas, modernas, y en continuo desarrollo personal y profesional. Busca que sean personas que estén en una mejora constante, buscando mejorar su productividad, reduciendo gastos, o sea, lo contrario a lo que sería una persona acomodada en su trabajo.

No crecer antes de tiempo

No crecerse antes de tiempo es otro de los consejos que ha mencionado el empresario. Él pone como ejemplo que una de sus empresas más importantes, Grupo Carso, siempre tuvo sus oficinas en plantas de naves industriales, pero cuando el negocio realmente lo requirió, y no antes, las mudó a unas oficinas públicas más vistosas.

Uno de los consejos que
Uno de los consejos que ha dado Slim es no crecerse antes de tiempo. EFE/Xoán Rey.

Esto a pesar de que tenía el dinero suficiente para tener oficinas de primer nivel desde el primer momento, pero no lo consideró necesario, pues sus negocios no lo requerían. Y es que en ocasiones, cuando se inicia un negocio, se acostumbra gastar en cosas innecesarias, en vez de dejar que el rumbo del proyecto nos haga crecer.

Trabajo en equipo

Slim cree que no hay reto que no se pueda alcanzar trabajando unidos, con objetivos claros, y con conocimiento de los instrumentos para lograrlo. Este punto se refiere, básicamente, a que la unión hace la fuerza, y la empresa debe tener una visión clara de lo que quiere y hacia donde va, y esta visión debe ser transmitida a todo el personal que trabaja en el proyecto, para que entre todos la hagan realidad.

No miedos, no culpas

Slim también ha declarado que se debe vivir sin miedos ni culpas, pues los miedos son los peores sentimientos de las personas, pues las debilita e impiden su acción, y además, las deprime. Por otro lado, la culpa es un enorme lastre en el pensar de las personas, en su actuar, y en general, en la vida.

Entre el miedo y la culpa, el presente se vuelve difícil, y sobre todo, se dificulta el camino hacia el futuro, por eso no hay nada mejor para vencer al miedo, que actuar, pues la acción alimenta nuestra confianza, mientras que la indecisión alimenta el miedo.

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