Este martes entró en vigor el decreto por el que se declaró Área de Protección de Recursos Naturales a la zona conocida como Lago de Texcoco, en los municipios de Texcoco, Atenco, Chimalhuacán, Ecatepec de Morelos y Nezahualcóyotl en el Estado de México.
El decreto de Área Natural Protegida permitirá que en la zona de Texcoco se desarrollen actividades como ecoturismo, restauración ecológica, reforestación con especies nativas, agricultura y ganadería orientadas a la sustentabilidad y aprovechamiento a través de Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMAs).
Antes de integrarse Texcoco, México poseía 183 áreas naturales de carácter federal que representan 90,956,124 hectáreas y apoya 371 Áreas Destinadas Voluntariamente a la Conservación, con una superficie de 604,906.7 hectáreas, las cuales son administradas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Actualmente México tiene 67 Parques Nacionales, 44 Reservas de la Biósfera, 41, Áreas de Protección de Flora y Fauna, 18 Santuarios, nueve Áreas de Protección de Recursos Naturales, y cinco Monumentos Naturales.
De la superficie total de Áreas Naturales Protegidas, 21,497,511 hectáreas corresponden a superficie terrestre protegida, lo que representa el 10.94% de la superficie terrestre nacional. En lo que respecta a superficie marina se protegen 69,458,613 hectáreas, lo que corresponde al 22.05% de la superficie marina del territorio nacional.
La Reserva de la Biosfera Pacífico Mexicano Profundo es actualmente el área natural protegida con mayor superficie de México. Fue decretada el 7 de diciembre de 2016, y tiene una superficie de 43,614,120 hectáreas. Se ubica frente a la costa de los estados de Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
La vaquita marina del Golfo de California, es la especie que se encuentra en mayor peligro de extinguirse de todos los mamíferos marinos en el mundo. Se trata de una especie endémica de México y que se desplaza en aguas someras del Alto Golfo de California.
Otras áreas naturales de gran extensión e importancia para el país son la Biósfera del Alto Golfo de California (donde se protege a la vaquita marina) y Delta del Río Colorado, con una superficie total de 934,756.25 hectáreas, seguida del Arrecife Alacranes con 333,768.51 hectáreas.
Mientras que Quintana Roo y Chiapas son los estados que poseen el mayor número de áreas naturales protegidas de competencia federal, contando con 18 áreas cada una.
México también cuenta con 5 Monumentos Naturales, los cuales se encuentran distribuidos en los estados de Chiapas, Nuevo León, Chihuahua, Coahuila y Oaxaca, los cuales son Bonampak, el Cerro de la Silla, el Río Bravo del Norte, Yagul y Yaxchilán.
En Texcoco se cuidarán más de 678 especies de flora y fauna incluyendo algunas de las más representativas de la cuenca del valle de México. Además se protegerá el refugio de los más de 150 mil ejemplares de aves migratorias que arriban en invierno.
Se prohibirá la alteración o destrucción de ecosistemas de la vida silvestre, el desarrollo de fraccionamientos inmobiliarios o nuevos centros de población, nuevas obras de exploración y explotación minera, así como la modificación del entorno natural de los vestigios históricos arqueológicos.
Para proteger las 14 mil hectáreas existe una inversión de 4 mil 566 millones de pesos, beneficiando así de manera directa a una población total de 12.5 millones de habitantes, según el gobierno federal.
La importancia ambiental del Lago de Texcoco radica en su carácter como principal vaso regulador hídrico del Valle de México y como regulador climático que incrementará la ventilación y regulará la temperatura de la zona.
Antes de la llegada de los españoles a México, la urbe que se ubicaba en lo que ahora conocemos como la Ciudad de México era Tenochtitlan, donde se instaló el imperio mexica.
Tenochtitlan era una ciudad que se encontraba sobre un islote en medio del Lago de Texcoco. Una de las preguntas que seguramente más se cuestiona la gente es cómo se logró construir la Ciudad de México sobre un lago. La respuesta está en que el lago fue desecado para la construcción y ampliación de la zona habitable.
Hoy el lago está prácticamente extinto, y varias zonas de la Ciudad de México sufren por falta de agua, razón por la que grupos ecologistas demandan acciones para su rescate.