Zumpango es uno de los 125 municipios que conforman los 22 mil 500 kilómetros cuadrados del Estado de México. Se trata de una localidad que se ubica al noroeste de la entidad y colinda con los territorios de Tequixquiac, Hueypoxtla, Teoloyucan, Cuautitlán, Nextlalpan, Jaltenco, Tecámac, Tecámac, Cuautitlán, Teoloyucan, Coyotepec, Huehuetoca y con el estado de Hidalgo. Se encuentra a 54 km de la Ciudad de México.
El sitio no sólo destaca por albergar al nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), también resalta por la gran trayectoria histórica y cultural que ha conformado la identidad de sus habitantes.
Las raíces prehispánicas se dejan ver desde el nombre, pues de acuerdo con el Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (INAFED) la denominación es una descomposición hispana que en realidad viene del náhuatl Tzompanco que se compone de la expresión Tzompantli que significa “hilera de cabelleras” y Co que refiere a un” lugar, sitio o espacio ocupado”. Los especialistas han determinado que la traducción general es “Lugar del tzompantli”.
Por otra parte, en el siglo XIX se le agregó el apellido de “Ocampo” en honor al político y científico liberal Melchor Ocampo, uno de los personajes más destacados del período juarista que además fue gobernador del estado de Michoacán en 1846.
Durante mucho tiempo se determinó que los orígenes de este lugar se remontan al año 200 a.C., no obstante, los hallazgos de restos de mamuts, armadillos gigantes, perezosos, fósiles de camellos, caballos y un tigre dientes de sable que se encontraron recientemente durante la construcción del AIFA, revelaron que una parte del territorio estuvo habitada desde la Prehistoria.
Estos descubrimientos agregan a Zumpango a la lista de los municipios más antiguos del EDOMEX. Sin embargo, los primeros asentamientos de los que se tiene un registro y un análisis formal se deben a Jeffrey R. Parsons, un arqueólogo norteamericano que se dedicó a estudiar la localidad. Después de sus investigaciones entregó un informe al Departamento de Monumentos Prehispánicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en 1974.
Parsons dividió los asentamientos precolombinos en 5 fases, la primera fue denominada Petlachique-Tzacualli, que va de los años 200 a.C. al 100 d.C. Durante este período se registraron asentamientos en las orillas del antiguo lago de Zumpango.
El segundo fue el “Periodo clásico (100-700 d.C.) en el cual se aprecia “una sorprendente dispersión abundante de asentamientos, en su mayoría todos pequeños” En esta fase comenzaron a ser habitadas las regiones de Tlamimilolpan, Xolalpan y Metepec.
Debido a su cercanía con el estado de Hidalgo, se dice que al lugar llegaron grupos toltecas, otomíes y posteriormente chichimecas. La tercera fase se llamó Coyotlatelco del 700 al 900 d.C. tiempo en el que se identificó la llegada de pobladores a la cima del cerro de la Mesa grande, junto a Tequixquiac. La cuarta fue Mazapan (900-1100 d.C.) y la quinta y más importante: la Azteca, del año 1150 al 1520 d.C.
El INAFED explica que cuando gobernaba el tlatoani Tochpanehecatl de Tzompanco, decidió dar asilo a un pueblo migratorio “tenochcamexica quienes agradecidos por sus bondades ofrecieron en matrimonio a Tlacapatzin, bella doncella para su hijo Iluicaltl, de cuya unión surgió años después Acamapichtli, primer tlatoani de la gran México Tenochtitlán”. Lo cual quiere decir que parte de las raíces de los aztecas se gestaron en este territorio.
Más tarde, con la llegada de los españoles y la caída del Imperio mexica, Zumpango quedó bajo la administración del municipio de Cuautitlán, el cual se regía por encomenderos españoles. Fue hasta el año 1596 cuando Zumpango “pasó a convertirse en cabecera de Alcaldía Mayor, incorporándose a el pueblo de San Juan Zitlaltepec”.
La laguna de Zumpango desde siempre ha sido uno de los tesoros más grandes de la zona, ya que era un área natural de la que se aprovechaban múltiples recursos, en específico el agua. Por tal motivo, Hernán Cortés aprovechó el lugar y lo convirtió en un centro económico importante que fue encargado al español Alonso de Ávila.
El papel de los frailes también fue fundamental, ya que ellos se encargaron de las tareas de evangelización y de la construcción de la Parroquia Inmaculada de la Concepción en 1578, uno de los recintos más importantes de la región que actualmente se ubica en la cabecera municipal.
Gracias a la lucha de Independencia, el 31 de julio de 1820 se declara la autonomía de Zumpango y se constituye oficialmente como municipio. Luego, en 1847 la localidad destacó por participar activamente en la invasión norteamericana. La misma fuente apunta que también defendieron “de manera patriótica, eficaz y brava durante la época de la Intervención Francesa, (por esa razón) Benito Juárez nombró al municipio con el apelativo de “Zumpango de la Laguna, pueblo libre”.
En tiempos del Porfiriato se construyó la Caja de agua, inaugurada en 1900 por Díaz, la cual “forma parte de las obras del Gran Canal y su función es disminuir y regular la velocidad de las aguas antes de que entren a un túnel de 10 kilómetros que desemboca en Texquixquiac, también Estado de México”.
Actualmente destaca por la fabricación de juegos pirotécnicos, así como talleres artesanales de esferas de cristal. De igual manera sobresalen sitios como la Casa Cural y los templos católicos de Santa María, San Juan Bautista, el Señor del Barrio y San Pedro.
Según el último censo, la población en Zumpango es de 280 mil 455 habitantes, de los cuales un 48.8% son hombres y 51.2% son mujeres.
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