La presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero aceptó que durante su etapa como secretaria de Gobernación mantuvo diferencias con el ex consejero Jurídico de la Presidencia de la República, Julio Scherer, aunque dijo que el texto publicado por este último durante el fin de semana, donde la acusa de haber establecido una alianza de facto con el Fiscal General, Alejandro Gertz Manero, tiene algunas imprecisiones y adelantó que en algún momento ella revelará esa información.
Aunque en un primer momento negó hacer declaraciones sobre los señalamientos en su contra para “no caer en el juego” de la provocación, Sánchez Cordero fue cuestionada sobre este tema durante la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, donde finalmente aceptó: “Teníamos bastantes diferencias, era obvio que las teníamos. La realidad de las cosas es que hay algunas imprecisiones y en algún momento voy a decir cuáles fueron”.
Sobre las acusaciones públicas de Scherer en contra de la ex secretaria de Gobernación y el actual Fiscal General de la República, Sánchez Cordero consideró que estas diferencias se ventilaron en un momento inoportuno. Sin embargo, aclaró que por ahora no entrará en el debate pues su atención está dedicada en trabajar por la transformación de México.
El sábado se publicó un texto en el que Julio Scherer acusó que tanto Sánchez Cordero como Gertz Manero se valieron de su poder político para orquestar una investigación en su contra como una venganza personal, pues asegura que la entonces titular de Segob nunca pudo aceptar que se acotarán las tareas de la dependencia a su cargo.
Scherer detalló en el texto público que Sánchez Cordero presentó “una serie de fabulaciones respecto a mi relación con despachos como el de Rivera Gaxiola, Kalloi, Fernández, Del Castillo, Quevedo, Lagos y Machuca, así como el bufete Araujo, González, Peimbert, Robledo y Carrancá Abogados, entre algunos otros”.
Con esta carta pública, Julio Scherer Ibarra reviró a las filtraciones que lo ubican como extorsionador desde sus funciones como ex consejero Jurídico de la Presidencia en casos relevantes y acusó que esas implicaciones fueron armadas por la ex secretaria de Gobernación en alianza con el Fiscal General de la República.
AMLO se deslinda del conflicto
Luego de esta publicación, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su gobierno no intervendrá en las acusaciones que realizó Julio Scherer contra Olga Sánchez Cordero, presidenta del Senado, y el Fiscal General, Alejandro Gertz Manero.
López Obrador dijo en su conferencia matutina del lunes que dicha polémica corresponde al ámbito judicial, además de asegurar que su agenda presidencial prioriza otros asuntos: “No queremos participar en eso”.
“Decirles que eso tiene que ver con tribunales, con ministerio público, con juzgados y nosotros no vamos a meternos en esas diferencias (...) El presidente está ocupado en otros asuntos y tengo yo que priorizar”.
Sin embargo, semanas antes el presidente López Obrador reconoció que la salida de Sánchez Cordero de Gobernación y posteriormente el relevo del exconsejero Jurídico, se debió a diferencias entre ellos. Por eso optó por uno de sus más cercanos, el entonces gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández.
En las últimas semanas, en distintos espacios de análisis político, se difundió que la Fiscalía General de la República estaba tendiendo un cerco judicial en contra de personas cercanas a Julio Scherer, de quien se presume habría operado políticamente para detener casos judiciales relevantes a cambio de supuestos pagos. El ex consejero Jurídico dijo que publicó este texto para dar su versión de los hechos pues aseguró que se está afectando a su familia.
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