Según el reporte especial del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, “La COVID-19 y su impacto en las mujeres en México” el 70.3% de las mujeres del país reportaron sentirse inseguras en sus ciudades de residencia.
Cabe señalar que en marzo de 2020, al inicio de la pandemia, 78.6 % las mujeres de 18 años y más consideraban que vivir en su ciudad era inseguro en términos de delincuencia. Al dar inicio el confinamiento social, se presentó una baja en el porcentaje; sin embargo la cifra sigue siendo superior a la mitad.
Además, en términos de delincuencia, el porcentaje de hombres que consideran que vivir en su ciudad es inseguro es de 60.2%, casi 10 puntos porcentuales menos en comparación con las mujeres.
Porcentaje de población con percepción de inseguridad por tipo de espacio según sexo, 2021
(Datos del INEGI)
“En el caso específico de la casa, el cual ha sido un espacio socialmente asignado a las mujeres como lugar seguro para desarrollar la mayor parte de sus actividades, 20% de las mujeres de 18 años o más reporta sentirse insegura”
Según los datos ofrecidos por el reporte en 2021, los cajeros automáticos en vía pública fueron los lugares donde se percibió mayor inseguridad para la población en general; no obstante, en todas las categorías la percepción de inseguridad fue mayor en las mujeres.
Ya sea en el banco, en el transporte público o en el mercado, las cifras sobre percepción de inseguridad son mayores para las mujeres. Por ejemplo, en el caso de la calle el 69.5% de las encuestadas dijo sentirse insegura, lo que representa 9 puntos porcentuales más con respecto a los hombres. Otro lugar en el que más se sintieron vulneradas fue en el transporte público, con un 73.8% en comparación con el 64.2% de los hombres.
Además la escuela también representa un espacio violento para las estudiantes y/o docentes, ya que el 42.6% dijo sentirse insegura.
Si bien, respecto al tipo de delitos de los que fueron víctimas las mujeres, se identifica una disminución en el robo o asalto en la calle o transporte público no sucede así para otros rubros. En contraste, aumentaron los fraudes y las situaciones de violencia en el entorno familiar.
Cabe recordar que en enero de esta año, durante la presentación del reporte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, se dio a conocer que durante el 2021 se registraron 21 mil 189 violaciones simples y equiparadas, un 28.1% superior al 2020 cuando se reportaron 16 mil 544.
En un ejercicio de cuentas redondeadas, estos números significarían que cada día del 2021 se cometieron 58 violaciones y al mes mil 765. Además, si la cifra acumulada se dividiera entre los 32 estados de la República, implicaría que en cada uno se cometieron 600 violaciones al año (casi 2 por día). Esto por solo mencionar uno de los datos que refleja la inseguridad a la que se enfrentan las mujeres de país.
A esto se le suma que, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidad (ONU), los delitos contra mujeres en México ha incrementado con la pandemia de COVID-19. Se estima que en el mundo, 243 millones de las mujeres y las niñas entre 15 y 49 años, han sufrido violencia sexual o violencia física por parte de un compañero sentimental, durante los últimos doce meses.
Ante el cruento panorama y luego de registrarse los tres años más violentos para el país, en los que se contabilizaron alrededor de 108 mil homicidios dolosos y feminicidios, la secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, definió a finales de enero de este año algunas metas en el ámbito de seguridad: pacificar zonas donde persisten delitos, atender la violencia contra las mujeres, capacitar policías y mejorar los centros penitenciarios estatales.
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