Después de que presuntos integrantes del Cártel del Golfo destruyeran cerca de 90 cámaras de vigilancia la semana pasada en Reynosa, Tamaulipas, efectivos de la Policía Estatal retiraron más de 100 cámaras que formaban parte de una sofisticada operación de videovigilancia de la organización criminal.
Un operativo realizado el fin de semana en la ciudad fronteriza por elementos del Grupo de Operaciones Especiales (Gopes) consistió en la localización y retiro de más de un centenar de cámaras instaladas por el Cártel del Golfo en postes de luz y de teléfono.
A través de esta red ilegal de videovigilancia, la organización delictiva, además de robaba la señal de WI-FI de algunos domicilios y negocios locales, presuntamente enviaba información de video y sonido a los integrantes del cártel, según explicó una fuente consultada por Breitbart Texas.
Desde hace tiempo ha quedado documentado que el Cártel del Golfo utiliza cámaras de vigilancia y redes de radio clandestinas para observar los movimientos de corporaciones de seguridad federales y estatales o como una forma de mantener un control operativo de la región, algunas veces incluso superior al de las propias autoridades.
Las más de 100 cámaras fueron puestas a disposición de autoridades ministeriales para la continuación de las investigaciones y detener a los responsables.
La Secretaría de Seguridad Pública y el Grupo de Operaciones Especiales hicieron un llamado a la población para denunciar cualquier sospecha de uso ilegal o robo de señal de sus redes inalámbricas o de la presencia de cámaras que pudieran estar siendo usadas para cometer delitos.
El pasado viernes 24 de febrero se destruyeron varias cámaras de videovigilancia en Reynosa y días después el alcalde Carlos Peña Ortiz señaló que la destrucción de alrededor de 90 cámaras de vigilancia en la entidad pudo ser obra del Cártel del Golfo, en represalia por la captura de José Alfredo Cárdenas Martínez, el Contador, uno de los líderes de la organización delictiva.
Peña Ortiz detalló en una entrevista para Azucena Uresti que la vandalización de los equipos de seguridad es algo recurrente en la entidad, pues los criminales destruyen las cámaras para no ser captados realizando diferentes delitos, pero el tema se agudizó tras el arresto del Contador.
Aunque aún no se sabe con certeza cuál es el grupo delictivo que está en contra de los ataques, el mandatario manifestó que hay indicios de que el Cártel del Golfo sea el responsable de los hechos: “Desconozco de qué grupo se trata los responsables de la destrucción de las cámaras, aunque se presume que es del Cártel del Golfo”, aseguró.
La tarde de este martes 1 de marzo un comando armado interceptó y robó una unidad de transporte escolar para posteriormente utilizarlo para derribar postes con cámaras de vigilancia conectadas al C5 de la entidad.
Diversos estudiantes de la Universidad Tecnológica de Tamaulipas Norte denunciaron el hecho mediante redes sociales, pues aseguraron que los sujetos armados los bajaron de la unidad para tomar el control del camión, lo cual fue documentado por una de las personas que presenciaron los hechos.
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