Fiscalía de la Ciudad de México urgió hacer una reforma penal de violencia familiar

Las medidas de aislamiento, derivadas de la pandemia por COVID-19, causaron estragos en la salud mental de las personas que no querían salir por miedo a contagiarse, al mismo tiempo que mostró la precariedad en la que viven miles de mexicanos que debían exponerse para continuar con su trabajo.

Sin embargo, también estuvieron aquellas personas que sufrieron abusos dentro de sus hogares. En 2020 hubo un incremento en la violencia hacia las mujeres debido al aislamiento, a pesar de registrarse un descenso en el número de denuncias en comparación con el 2019.

En 2020 se abrieron 36,170 carpetas de investigación por diversos delitos cometidos hacia mujeres, 3.2% menos que en el año anterior, pero esto se debió a la imposibilidad de salir de los hogares y la ruptura de redes de apoyo por el aislamiento.

Por este motivo, la titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ernestina Godoy Ramos, urgió la elaboración de una reforma de tipo penal de violencia familiar que este enfocada principalmente en tópicos particulares relacionados con la operación y las expectativas sociales para enfrentar las agresiones intramuros.

Lo anterior lo estableció durante el conversatorio “Retos y desafíos de la Reforma al Tipo Penal del delito de Violencia Familiar” celebrado en el Salón de Usos Múltiples de la FGJCDMX a la cual asistieron representantes de la Secretaría de las Mujeres, del Poder Judicial y del Congreso de la Ciudad de México.

Dicho conversatorio tuvo la finalidad de impulsar modificaciones legales que protejan a mujeres y hombres a través de la discusión de ideas entre miembros de la sociedad civil, autoridades y legisladores, de acuerdo a un comunicado de la Fiscalía.

Señaló que los casos de violencia familiar deben ser atendidos con trabajo coordinado, interinstitucional y multidisciplinario para frenar a los agresores.

La representante de la Secretaría de las Mujeres destacó que se debía incidir principalmente en la parte operativa de la aplicación de medidas de protección a mujeres y niñas que son víctimas de violencia familiar.

El representante del Poder Judicial de la Ciudad de México, por su parte, se comprometió a trabajar con las instituciones representadas en el conversatorio, además de coincidir en que el delito de violencia familiar no debe quedar impune pues deben ser respetados los derechos de las víctimas.

La titular de la Coordinación General de Investigación de Delitos de Género y Violencia Familiar, estableció que la violencia de género es un ejercicio de poder dirigido principalmente de hombres hacia mujeres, niñas y niños.

Esta violencia se manifiesta en diversas formas y aparece en todos los ámbitos de la vida cotidiana: en la familia, en la escuela, en las instituciones públicas y privadas de la comunidad.

Agregó que las respuestas a los planteamientos generados en este conversatorio redundarían en proponer una reforma al tipo penal de violencia familiar, con base en las experiencias de todas las y los participantes. Finalmente, la titular de la FGJCDMX destacó que la importancia del conversatorio radicó en que la Ciudad de México sea un parteaguas para que pueda llevarse a nivel nacional.

En 2021, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se abrieron 17 mil 392 carpetas de investigación por violencia familiar, coronando la lista la Ciudad de México con 2 mil 301.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la violencia hacia las mujeres tuvo un aumento considerable a nivel mundial en los últimos doce meses, especialmente la violencia doméstica.

Se estima que en el mundo, 243 millones de las mujeres y las niñas entre 15 y 49 años, han sufrido violencia sexual o violencia física por parte de un compañero sentimental.

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