El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) volvió a hablar sobre la empresa petrolera estadounidense Baker Hughes, la cual tendría contratos vigentes en la refinería Dos Bocas y que además, uno de sus ejecutivos le rentó una casa ubicada en Houston, Texas, al primogénito del mandatario, José Ramón López Beltrán.
Sin que nadie le preguntara por el tema, López Obrador destacó que uno de los periodistas que hizo la investigación (Raúl Olmos) de la llamada Casa Gris, aseguró que nunca habló de conflicto de intereses.
“El periodista que hizo la investigación sobre la casa de mi hijo, que está rentando o que rentó un tiempo, reconoce que él no habló de conflicto de intereses. Pero miren cuándo viene a declarar, después de un mes de golpeteo (...)”, destacó.
Al encabezar la conferencia matutina en Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo federal destacó que un periódico de circulación nacional aseguró que Baker Hughes tiene contratos en la refinería Dos Bocas, la cual se está construyendo en el estado de Tabasco, entidad natal del presidente.
“(...) Que la empresa donde supuestamente trabajaba el dueño de la casa tiene contratos en Dos Bocas, donde se está haciendo la refinería. Pues puede ser, porque es una empresa petrolera internacional que tienen desde hace muchos años relaciones con Pemex, pero bueno (...) queriendo decir de que los contratos de Dos Bocas o por los contratos de Dos Bocas, que suponen yo ordené que se le entregaran a la empresa, que repito, no me he aprendido el nombre de la empresa, no conozco a nadie de esa empresa.. que por esos contratos le rentaron la casa a José Ramón”, aseguró al tiempo que soltó una risa de burla.
“Pero así de obvio y de mal intencionado, de perverso, porque así son los dueños” de ese medio, señaló el mandatario federal.
López Obrador recordó que ese mismo diario de circulación nacional ha insistido en que se informe en dónde están los 50 millones de dólares que Alonso Ancira (dueño de Altos Hornos de México) devolvió a Pemex como parte de la reparación del daño por la compra de la planta chatarra de Agronitrogenados, cuando Emilio Lozoya era el director de Petróleos Mexicanos.
“Ah, porque sacaron que dónde estaban los 50 millones de dólares de Ancira. Ancira tiene que devolver 200 millones de dólares por el sobreprecio que vendió la planta de fertilizantes en el sexenio anterior. Ya entregó 50 millones, pues los tiene Pemex y va a tener los 200 porque este año tiene que pagar 50 más y así hasta el (20)24 y así nosotros vamos a aportar 100 millones de dólares, para hacer 300 millones de dólares, para atender el problema de los fertilizantes, porque se están entregando fertilizantes a todos los productores de Guerrero de manera gratuita, pero también en Puebla, en Tlaxcala y se va a hacer lo mismo en Chiapas, en Oaxaca, Morelos, Zacatecas, Durango, Nayarit”, aseveró.
Cabe recordar que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades en la construcción de la refinería Dos Bocas por 59.2 millones de pesos, como pagos excesivos, adjudicación de contratos sin concursos abiertos, remuneraciones indebidas y deficiencias en la acreditación de profesionistas que han sido contratados.
En el informe de la Cuenta Pública 2020, la ASF resaltó que hay inconsistencias entre los volúmenes estimados contra los realmente ejecutados, además de diferencias en los montos pagados con respecto a las cantidades consideradas en la integración de las matrices de 14 precios unitarios.
La secretaria de Energía, Rocío Nahle, aseguró en su cuenta de Twitter que Baker Hughes tiene una presencia histórica en Pemex.
“La empresa Baker Hughes (constituida al fusionarse con GE Oil&Gas y Nuovo Pignone) tiene presencia histórica en Pemex, desde hace más de 40 años operan en las instalaciones compresores, turbinas, generadores eléctricos y motores de lo mejor. En Dos Bocas ya llegaron 2 turbinas”, escribió al tiempo que compartió una tabla en la que se detallan el número de compresores y equipos de proceso.
La casa gris
Fue a finales del mes de enero cuando una investigación periodística encabezada por reporteros de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) y del portal Latinus revelaron que José Ramón López Beltrán, el hijo mayor del presidente Andrés Manuel López Obrador, vivió junto a su esposa Carolyn Adams, en una mansión ubicada en Houston, Texas, la cual era propiedad de un alto directivo de la empresa petrolera estadounidense Baker Huges y tiene un costo de casi un millón de dólares.
El reportaje causó una infinidad de reacciones, así como la indignación del presidente y aseguró que el escándalo se debió a que sus “adversarios” a los que califica de conservadores y corruptos, se han “lanzado con todo”.
Posteriormente, el presidente reveló los supuestos ingresos millonarios (35 millones de pesos al año) del periodista Carlos Loret de Mola, quien dio a conocer la investigación periodística, lo que derivó en una condena, incluso internacional, por el hecho.
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