Al cierre de 2021, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) reportaron pérdidas netas por 319.8 mil millones de pesos (mmdp) en conjunto. La CFE obtuvo una pérdida de 95.4 mmdp, mientras que Pemex perdió 224.4 mmdp.
El pasado 26 y 28 de febrero, tanto la CFE como Pemex presentaron su resultados financieros y operativos al cuarto trimestre de 2021. A partir de ello, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) realizó un análisis comparativo de ambas empresas.
En el caso de Pemex, encabezada por Octavio Romero Oropeza, ha reportado pérdidas netas desde 2013. El año que más registró pérdidas fue en 2015 (172.6 mmdp) y en 2020 (509.1 mmdp), mientras que el año en que se obtuvieron las menores pérdidas fue en 2013 (169.9 mmdp).
La subsidiaria Pemex Transformación Industrial (PTI), que realiza las actividades de refinación y petroquímica, registró las mayores pérdidas del periodo, que fueron por 172.4 mmdp. Además, dicho segmento fue el único que reportó pérdidas brutas (por 83.4 mmdp).
Lo anterior, apunta el IMCO, quiere decir que lo vendido por PTI durante el año pasado fue 83.4 mmdp mayor que los ingresos obtenidos por su venta. Asimismo, al finalizar el 2021, la empresa productiva del Estado presentó una deuda total de 2.24 billones de pesos, lo que equivale al 8.6% del Producto Interno Burto (PIB) de México en 2021.
De dicho saldo total de la deuda, 21.7% corresponde a deuda de corto plazo (menos de un año), mientras que el resto (78.3%) concierne a deuda de largo plazo (más de un año). No obstante, este saldo es menor a lo reportado al cierre de 2020, que fue de 2.26 billones de pesos.
Otro de los mayores gastos de Pemex fue por el pago de intereses, comisiones y otros gastos relacionados a su deuda. En total, en 2021 pagó 145.8 mmdp en dicha materia, esto es, 16 mmdp menos que al monto de 2020, que fue de 161.8 mmdp (9.9% menos).
Por otro lado, la empresa estatal registró “un avance marginal en la plataforma de producción de petróleo crudo de Pemex” por primera vez en diez años, en un periodo comprendido del 2011 al 2021, año durante el cual se produjeron 27 mil barriles diarios, lo que generó un amentó de 1.6% en la producción de crudo.
Esta producción, de igual manera, se incrementó por primera vez en más de una década. Mientras que en 2021 se produjeron 1.69 millones de barriles diarios (MMbd), en 2020 la producción diaria fue de 1.66 MMbd.
En cuanto al gas natural, el año pasado, Pemex presentó el mejor nivel desde 2011, el cual fue de 4 mil 746 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd) de gas natural, producción menor a la obtenida al cierre de 2020, en el que se reportaron 4 mil 852 MMpcd.
Por último, Pemex obtuvo la mayor producción de petrolíferos desde hace 4 años. Al 31 de diciembre de 2021, se produjeron 714 mil barriles diarios (Mbd) de petrolíferos en las seis refinerías del Sistema Nacional de Refinación, un incremento del 20.9% frente a lo producido en 2020. El petrolífero que más se produjo en las refinerías de Pemex fue el combustóleo, del cual se produjeron 224 Mbd, cifra superior a la obtenida en 2020, que fue de 176 Mbd.
Resultados de la CFE
En el caso de la CFE, presentó pérdidas por segundo año consecutivo, luego de que reportara ganancias entre 2016 y 2019. Durante esos cuatro años se obtuvieron ganancias de 289.2 mmdp. Sin embargo, debido a la helada que impactó en el estado de Texas, Estados Unidos, en febrero de 2021, la empresa suministradora de energía obtuvo una pérdida 10.9% mayor a la registrada en 2020, que fue por 86 mmdp.
De igual manera, la CFE presentó una deuda total de 393.9 mmdp, saldo 8.4% mayor a lo obtenido en 2020. De dicha cantidad, 90.5% corresponde a deuda de largo plazo y el resto a deuda de corto plazo. En lo referente al pasivo laboral, se redujo 23.1% entre 2020 y 2021, ya que pasó de 480 mmdp a 375.1 mmdp.
En cuanto a sus ingresos, la CFE incrementó la venta de combustibles a terceros, en específico la comercialización de gas natural, pues aumentó 168.9%, al pasar de 21.5 mmdp en 2020 a 57.8 mmdp en 2021.
Por último, la adquisición de energéticos y otros combustibles a terceros representó un mayor costo para la CFE, ya que pasó de 25.3 mmdp a 62.3 mmdp, lo que equivale a un incremento de 146.2% en comparación a lo registrado en 2020.
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