Morro(a), tipo(a), cuate, joven... En la jerga mexicana hay múltiples palabras que sirven para nombrar a otras personas y “chavo(a)” también pertenece a esta lista de vocablos, pero ¿desde cuándo se empezó a usar? y lo más importante ¿por qué se hizo tan popular entre la sociedad de México?
Es preciso saber que la mayoría de los términos coloquiales tienen su origen en hechos culturales e históricos relevantes, tal es el caso de “chavo” una voz que, según la revista de Filología Española, viene de la palabra española “chaval” y llegó al territorio en el siglo XVI en tiempos de la Nueva España.
Pero antes de entrar en más detalles, es importante mencionar que la Real Academia Española (RAE) la define como un nombre masculino y femenino que se usa en países como México, Nicaragua y Honduras para referirse a un “niño que no ha llegado a la adolescencia”, además se aclara que en Nicaragua también es utilizada para nombrar a “la persona que mantiene relaciones amorosas”.
Por otra parte, el Diccionario Breve de Mexicanismos del lingüista Guido Gómez de Silva apunta que la base de estas cinco letras viene “posiblemente del español chaval y chavó” y se usan para hablar de algún niño, adolescente, joven o muchacho. Esta última definición empata más con el uso cotidiano que se le da a la palabra, puesto que, regularmente se usa para referirse a una persona joven, más que a un niño como lo indica la RAE.
No obstante, cabe mencionar que la misma fuente también señala que tiene un sentido metafórico, pues el decirle chavo o chava a alguien puede significar que se está expresando que la otra persona, aunque sea de edad avanzada, tiene poca o nula experiencia en algo. Es por eso que es muy común escuchar “estás muy chavo” para hacer referencia a la falta de preparación que tiene alguien, tal y como los más pequeños tienen poca práctica en la vida por su corta edad.
De acuerdo con la autora Erica Colmenares, una de las razones por la que hoy en día es muy común escuchar en las calles este término se debe -en parte- a la popular serie mexicana de comedia El Chavo del 8, la cual fue dirigida por Enrique Segoviano y Roberto Gómez Bolaños.
Se argumenta que “la figura del pequeño huérfano, sin malicia y sin destreza en la vida se convirtió en la imagen del imaginario social de lo que es un chavo”. Asimismo, al igual que las palabras chanfle, chispotear, chusma, chiripiorca, etc., chavo fue uno de los tantos términos que se hicieron más famosos debido al programa del también llamado Chespirito.
Cabe resaltar que en algunos análisis se ha hecho énfasis en la costumbre de Gómez Bolaños por utilizar palabras con las letras “ch”, incluso, algunos de sus personajes también se caracterizaban por empezar con dichas grafías.
La voz en cuestión también existe en otros países de América Latina y España, sin embargo, el significado cambia sustancialmente. La RAE indica que en Puerto Rico es una forma de llamarle al dinero, en especial al centavo de un dólar o a una “moneda corriente”. En Cuba se le da una connotación similar, ya que ahí se utiliza para nombrar a una “moneda que vale la centésima parte de un peso”.
Finalmente, el vocablo ha dado origen a expresiones como “chaviza” y “chavorruco”. El primero, según la RAE, se refiere al conjunto de personas jóvenes que regularmente “se divierten en grupo y visten a la moda”. El segundo es un término informal para referirse a una persona adulta que tiene actitudes o participa en actividades típicas de una persona de corta edad.
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