Iván Reyes Arzate, ex comandante de la Policía Federal mexicana, y cercano al ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, irá a prisión. Un tribunal de Nueva York lo condenó este miércoles a una pena de 10 años de prisión por el delito de conspiración para traficar cocaína a Estados Unidos, del que ya se había declarado culpable.
El juez Brian Cogan ha optado por la pena sugerida por el fiscal Breon Peace, considerando que durante su cargo frente de la corporación, Reyes Arzate entregó información clasificada a organizaciones criminales.
Poco después de las 10:45 horas (GMT-6), este hombre apodado La Reina se dirigió en español al tribunal para decirse arrepentido. En la audiencia, de aproximadamente 40 minutos, Cogan explicó que el ex comandante no sería testigo protegido y cerró la posibilidad de que pudiera cooperar en el juicio de García Luna, acusado de tener nexos con el Cártel de Sinaloa.
Además de esta sentencia, Reyes Arzate había acordado el pago de USD 290 mil obtenidos por sobornos a cárteles de la droga.
A la sentencia de 10 años, hay que restarle los dos que ya llevaba preso en una cárcel de Nueva York.
Iván Reyes Arzate podría ser trasladado a una prisión federal para cumplir el resto de su pena.
La Reina se declaró culpable en octubre del año pasado, al admitir haber recibido USD 290 mil a cambio de informar sobre las investigaciones conjuntas que México y EEUU tenían acerca del grupo criminal llamado El Seguimiento 39, asociado a los cárteles de Sinaloa y Beltrán Leyva.
En 2003 Reyes era parte de la Unidad de Investigaciones Especiales de la Policía Federal, un área dedicada a combatir el crimen organizado en estrecha colaboración con la DEA. Cinco años después fue ascendido como titular de dicho departamento, y trabajó en cercanía con el entonces secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
El ex comandante de la Policía Federal ya había sido juzgado en Chicago, Estados Unidos, en 2018; sin embargo, a principios del 2020, una corte de Nueva York lo señaló de nuevo por narcotráfico.
Reyes Arzate es considerado como traidor en el gobierno de Estados Unidos por entregar información reservada. En abril de 2017, por ejemplo, la conversación entre dos narcotraficantes captada por la DEA destapó las actividades ilícitas del policía, con la banda criminal de los Beltrán Leyva.
Según la Agencia Antidrogas, Reyes recibió sobornos de la organización familiar a cambio de investigaciones sobre ellos. En 2016, información facilitada por Reyes a los Beltrán Lyeva llevó a la tortura y asesinato de una fuente confidencial de la DEA en Miami. Reyes no sólo era perfectamente consciente de esto, sino que estuvo en la reunión donde se decidió el asesinato y junto con otras dos personas, cobró USD 3 millones por esta información.
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