Abelina López, alcaldesa de Acapulco, puerto del estado mexicano de Guerrero, enfrenta actualmente severas críticas tras sus polémicas declaraciones sobre los altos índices de violencia en la ciudad a su cargo. La edil dijo que, entre otros factores, la lacerante situación se debía a las altas temperaturas y el consumo de carbohidratos.
“Tiene que ver con muchos factores, nosotros tenemos al rededor de 16.2 % de pobreza extrema que puede ser un factor de violencia, el tema de género, también pude ser un factor de violencia, la falta de empleo, ‘la calor’, una mala alimentación, (...) si comes más carbohidratos te acelera”, fueron sus dichos.
Los señalamientos en su contra no se hicieron esperar. Aunque cabe señalar que sí hay estudios que apuntan hacia lo dicho por la alcaldesa. Sin embargo, en ninguna de la resoluciones científicas se menciona que las altas temperaturas desencadenen el azote del crimen organizado que ahora mismo experimenta la ciudad más grande de Guerrero.
Por ejemplo, la revista Science que en 2013 publicó el artículo “Cuantificación de la influencia del clima en los conflictos humanos”, que apuntaba como resultado: “Las desviaciones de las precipitaciones normales y las temperaturas suaves aumentan sistemáticamente el riesgo de conflicto, a menudo de forma sustancial. Esta relación es evidente a través de escalas espaciales que van desde un solo edificio hasta el globo y en escalas temporales que van desde una hora anómala hasta un milenio anómalo (...) cada cambio en el clima hacia temperaturas más cálidas o lluvias más extremas aumenta la frecuencia de la violencia interpersonal en un 4 % y el conflicto entre grupos en un 14 % (estimaciones medianas)”.
“Concluimos que hay más acuerdo entre los estudios sobre la influencia del clima en los conflictos humanos de lo que se ha reconocido anteriormente. Dados los grandes cambios potenciales en los regímenes de precipitación y temperatura proyectados para las próximas décadas, con ubicaciones en todo el mundo habitado que se espera que se calienten entre 2 y 4 SD para 2050, las tasas amplificadas de conflicto humano podrían representar un impacto social importante y crítico del cambio climático antropogénico. tanto en países de ingresos bajos como altos”, apunta el artículo.
De igual manera, debido a las críticas, la presidenta municipal emitió un comunicado en el que explicó que sus respuestas se basaaron en información que leyó en un artículo de la BBC en el que se explicaba que las altas temperaturas podían propiciar “cambios en la actitud y el ánimo de las personas” en el cual se baso para señalar que “la calor” podía ser un factor de violencia.
En dicho artículo realizado por la BBC se explica: “En México, hay más crimen organizado en las zonas con climas más cálidos, y algunos académicos sospechan que esto se debe a que crea un “gusto por la violencia” “derivado de las temperaturas altas, según dicha investigación.
Sin embargo no ahondó más sobre la información relacionada con el consumo de carbohidratos y su relación con la violencia en el municipio, únicamente agregó: “En dicha entrevista refería los excesos de alimentos nocivos que hay en la alimentación diaria de muchos hogares”.
No obastante, la alcaldesa de Acapulco se disculpó por lo que dijo. “Entiendo que mi error fue no poder expresar de manera correcta estás ideas en la entrevista mencionada. Y ofrezco disculpa a aquellos ciudadanos que se hayan ofendido por mis palabras”. En el comunicado también acusó que muchas personas suelen burlarse de ella “por sus orígenes humildes”.
Precisamente Acapulco enfrenta una ola de violencia alarmante desde 2021. Incluso, la Secretaría de Gobernación (Segob) comenzó la primera fase de un plan para promover la cultura de la paz y reconstrucción del tejido social, con ese propósito, se puso en marcha el plan Juntos cuidaremos nuestro Acapulco, un programa del Ejército.
Aún no termina el primer mes de 2022 y ya se registró en esa zona el acribillamiento a balazos de un líder sindical presuntamente por parte de un grupo de sicarios. Asimismo, el 21 de enero ejecutaron a un policía ministerial de Guerrero en la carretera de Chilpancingo. Mientras que 10 días antes, empresarios de Acapulco pidieron frenar la violencia tras secuestro y asesinato del dueño de unas farmacias. Tras la creciente inseguridad en el puerto, el mando militar presente en el estado desplegó a 220 elementos encargados de la seguridad pública.
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