El asesinato de dos turistas canadienses en el hotel Xcaret de Quintana Roo fue planeado con semanas de anticipación por adeudo de drogas en una trama internacional y los supuestos delincuentes fueron vigilados diariamente mientras estaban de vacaciones.
La fiscalía del estado presumió que hay dos detenidos, entre ellos, el integrante de una banda de sicarios que fue contratado para emplear a quienes llevarían a cabo el trabajo. Además de una mujer que viajó con el grupo de turistas extranjeros al paraíso turístico mexicano.
Óscar Montes de Oca, fiscal de Quintana Roo, explicó que Cristian R fue encomendado a encabezar las operaciones del crimen, desde principios de este 2022. Él era miembro de una célula del crimen organizado para esas tareas y se le contrató en la Ciudad de México.
Ya con la orden reclutó a dos sujetos que participarían en la ejecución y los tres viajaron desde la capital del país a Quintana Roo el 16 de enero pasado. Los sicarios sabían del arribo y la ubicación de su objetivo.
Incluso, planearon el asesinato en Playa del Carmen, a donde Robert James Dinh, Thomas Cherukara, Ceara Jessica Sahadee Yari y siete personas más habían planeado su visita del 15 al 22 de enero por la Riviera Maya. Aunque el final del viaje sería funesto.
Al día siguiente de su llegada, los supuestos criminales comenzaron el seguimiento en el complejo turístico, porque tenían acceso provisional mediante un pase. Durante su visita recibían información en tiempo real vía telefónica sobre las actividades de los presuntos operadores del narco, quienes estarían ligados a una banda de Vietnam que trafica éxtasis, cocaína y marihuana en Canadá como en Estados Unidos.
Se sospecha que quien proveía de esos datos al interior del grupo de turistas habría sido Nhu “T”, quien viajó de Canadá con los vacacionistas. Tanto ella como Cristian R fueron los primeros en caer en manos de las autoridades y ya se encuentran imputados por homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa, aunque su vinculación a proceso se decidirá este 29 de enero.
El hombre y la mujer trabajaron en conjunto, pero los dos sicarios contratados inicialmente se rehusaron a terminar su trabajo y se retiraron de Quintana Roo. Uno de los obstáculos identificados fue la constante presencia de vigilancia en el hotel Xcaret, como policías a las afueras, según investigaciones de la fiscalía estatal.
Cristian R notificó a su contratante de la complejidad y para el 21 de enero recibió otra orden: debía recoger a un nuevo sicario en el aeropuerto del estado y conducirlo con el objetivo. Presuntamente provenía desde Iztapalapa, en la Ciudad de México, pero el fiscal no aclaró esto último por indagatorias en curso.
Ese mismo día ingresaron al hotel con brazaletes que les fueron útiles para permanecer en las instalaciones. Al nuevo asesino le dieron todos los detalles de Robert James Dinh, sujeto de 34 años que, presuntamente, fungía como brazo derecho Cong Dinh, capo por quien se ofrecieron 50 mil dólares canadienses en diciembre de 2019.
A las 14:45 horas se acordó esperar al criminal en un punto determinado a bordo de un vehículo, para que lograra darse a la fuga. Los dos se comunicaban por teléfono constantemente.
Pero 40 minutos antes de que ocurrieran los hechos, el agresor se encontró con Nhu “T. Los dos platicaron durante tres minutos, de acuerdo a videos obtenidos del circuito de seguridad del centro de hospedaje.
Las imágenes de cámaras de vigilancia captaron parte del transcurso del sicario hasta que llegó a donde se encontraban Robert James Dinh, Thomas Cherukara y Ceara Jessica Sahadee Yari, entre una suma de huéspedes cerca del área de comidas y alimentos y en el corredor de madera que daba a una alberca. La mujer era pareja de uno de los objetivos.
Enseguida, los vacacionistas notaron una discusión y tan pronto como escucharon los disparos corrieron para resguardarse. Una cámara captó cinco balazos y luego de ello el pánico se apoderó de los visitantes. Los cuerpos quedaron tendidos bocabajo, sangrando. El sicario se internó en la maleza selvática adjunta y otros vacacionistas pidieron ayuda.
Thomas Cherukara murió en su traslado al hospital y Robert James Dinh, unos minutos después, mientras recibía atención médica en el nosocomio. La mujer también fue herida y desde esa fecha sigue internada pero aún no está disponible a las autoridades para entrevistarla.
Los demás canadienses del grupo, incluidos tres menores, permanecen en el país. Mientras que los cuerpos de los extranjeros están en el Servicio Médico forense en trámites para ser repatriados. La policía de Canadá reportó a las autoridades de Quintana Roo que los ejecutados estaban ligados al narcotráfico, robos, armas, delitos contra la propiedad y uso falso de identidad.
El asesino llegó al coche blanco donde era esperado por Cristian R, se quitó la sudadera gris y la tiró al piso. Enseguida se metió dentro de la cajuela y los dos emprendieron la huida para ocultarse. Las investigaciones permitieron dar con el conductor del vehículo el pasado 22 de enero, pues también había rentado un departamento en el municipio de Benito Juárez.
La Fiscalía de Quintana Roo advierte que el asesinato se planeó en el extranjero, pero concluyó en el hotel Xcaret, de ahí que se mantienen coordinaciones con Canadá y la Fiscalía General de al República por delitos de delincuencia organizada. Sobre investigaciones de la Administración del Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) no se precisaron mayores detalles.
SEGUIR LEYENDO: