El lunes se informó que falleció la madre del empresario Arturo Elías Ayub, uno de los hombres de negocios más populares e importantes de México. Silvia Ayub murió de causas aún desconocidas, además de que el empresario no se ha pronunciado al respecto.
Dicha noticia se dio a conocer a través de una esquela publicada por la Fundación Telmex Telcel, en la que escribieron “...lamenta profundamente el sensible fallecimiento de Doña Sylvia Ayub de Elías. Enviamos nuestras condolencias y nos unimos a la pena que embarga a la Familia Elías Ayub, por esta irreparable pérdida. Descanse en paz”.
Posteriormente, la noticia fue confirmada por el portal oficial de Uno TV, donde publicaron el siguiente mensaje: “Quienes trabajamos en esta empresa nos unimos a la pena que embarga a la familia Elías Ayub por esta irreparable pérdida”. Cabe destacar que Arturo Elías Ayub es director de General de Fundación Telmex Telcel, de Uno Tv, y de Claro Sports, además de desempeñarse como director de Alianzas Estratégicas y Contenidos de América Móvil.
El empresario es uno de los hombres de mayor confianza del hombre más rico de México, Carlos Slim Helú, además de que es su yerno, pues está casado con su hija Johanna Slim Domit desde hace 25 años.
El empresario fue entrevistado en un podcast llamado Cracks, el cual es conducido por Oswaldo Trava, también conocido como Oso Trava. En dicha entrevista, Elías Ayub dio algunos tips para tomar en cuenta a la hora de cerrar un negocio.
El yerno de Slim menciona que la regla número uno de una buena negociación, o sea, la más importante, es en la que salen ganando ambas partes, y menciona que cuando se crea empatía, se logra que ambos quieran eso.
“Se convierte la negociación en un ejercicio de ganar-ganar, mucho más importante al final del día, que quién se friega a quién”, explica el empresario. También habla sobre estudiar a su contraparte, que dice, también forma parte de una estrategia buena para negociar.
“Hoy yo creo que tenemos muchísima información, yo antes de negociar lo que sea, busco, ahora sí que stalkeo cañón a con quien voy a negociar, si veo su Instagram y veo a donde fue el fin de semana y cómo se llaman sus hijos, y cómo se llama su perro, si no tiene hijos, y entonces llegó a la negociación, y le digo: ¿Oye, y cómo está Firulais?, porque sé que el amor de su vida es el perro y se llama Firulais porque ya lo puso en su Twitter o en su Face, e inmediatamente lo desarmas, porque dice: Qué buena onda este güey que esté interesado en mi perro, que es lo que a mí me interesa, o: oye, qué padre que tu hija está estudiando Administración, se me hace una carrera increíble porque fíjate que bla bla bla...”, menciona el empresario.
Dice con con eso vas de gane, pues la otra persona va a decir que qué agradable que estés interesado en su persona.
Dice que entre más información tengas, te darás cuenta de qué es lo que realmente quiere la persona con la que vas a negociar para él y qué quiere para el negocio que harán, que en muchas ocasiones a él le ha tocado negociar con CEO´s estadounidenses que a la hora de vender la empresa se llevan una cantidad importante de dinero “porque fueron el CEO que vendió la empresa, y a lo mejor entonces dices, bueno a este cuate lo que le importa más es esto, y entonces aprietas por un lado pero pues no, proyectar por acá, porque sé que ahí se me va a atorar, en lo personal de él, o a lo mejor a lo que le interesa a ese cuate es quedarse operando la empresa, y entonces lo que haces es, digo, si es un cuate abusado y si vale la pena: oye, ¿Por qué no te quedas operándola tú dos años?, y entonces ahí ya lo mataste, porque es el dueño de la empresa, o lo que le interesa es que el nombre de la empresa siga siendo su nombre aunque te la quedes tú, porque familiares, porque viene del abuelo y del bisabuelo y lo único que no quiere es que la empresa quiebre y perder el nombre de la familia”, explica.
Dice que siempre habrá algo que en lo personal le puede interesar más que la parte económica de la empresa, y que cómo en una empresa, eso aplica en cualquier negociación de tu vida, pues debes de saber realmente cuáles son las necesidades de con quien estás negociando. “Hay que entender realmente de fondo que es lo que quiere la persona”, concluye.
SEGUIR LEYENDO: