Tras condena a “El Marro”, Epigmenio Ibarra pidió enjuiciar a Calderón por “ensangrentar” a México

El ferviente simpatizante de la Cuarta Transformación (4T), Epigmenio Ibarra, se pronunció en sus redes sociales luego de la condena de 60 años que José Antonio Yépez Ortiz, el Marro, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, recibió el pasado 14 de enero.

A través de su cuenta de Twitter, el también cineasta reconoció la sentencia del capo y, con ello, hizo un llamado para ahora enjuiciar al expresidente, Felipe Calderón Hinojosa, el hombre que, exclamó, “ensangrentó a México” y “traicionó a la patria”.

La publicación se acompañó del hashtag #ParaCalderonJuicioyCastigo, con el cual Ibarra ya ha exigido la aprehensión en contra del militante de Acción Nacional (PAN) en ocasiones anteriores: “Yo a Felipe Calderón no he de soltarlo hasta que lo agarren”, expresó en un post del 23 de abril del 2021.

Sin embargo, el productor de televisión no ha necesitado de ese hashtag para arremeter contra el exmandatario, principalmente, por los casos de narcotráfico que protagonizaron su administración (2006-2012) y cuyos datos, aseveró, “irán saliendo en las cortes de Estados Unidos”.

Esto lo pronunció el pasado 20 de octubre del 2021 luego que Iván Reyez Arzate, exjefe de la Policía Federal, se declarara culpable por tráfico de drogas ante las autoridades de EE.UU. Cabe señalar que el exservidor fungía como hombre de confianza de Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública (SSP) en el gobierno de Calderón.

Éste último fue incluido entre las siete personas contras la cuales, el 9 de enero del 2022, un juez de distrito ordenó la aprehensión por su participación en el operativo conocido como “Rápido y furioso”. A la lista también se encontraban Joaquín El Chapo Guzmán y Luis Cárdenas Palomino.

Por supuesto, el hecho valió de otro pronunciamiento de Epigmenio Ibarra a modo de “advertencia” hacia el blanquiazul: “Más rápido y más furioso que nunca tendrá que preparar su defensa Felipe Calderón. Se le acerca la justicia de ambos lados de la frontera”.

Y es que a razí del fallido operativo se introdujeron más de 2 mil armas a México con chip con el objetivo de venderlas a criminales para poder ser rastreadas y así identificar a los responsables de la violencia armada en el país; sin embargo, esto no ocurrió así.

Para la realización de dicha estrategia, el gobierno federal de Felipe Calderón coordinó esfuerzos con la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) del país vecino, no obstante, ninguno de los esfuerzos de las dos naciones lograron su adecuada implementación.

El escándalo relacionado a “Rápido y furioso” estalló debido al hallazgo de dos rifles de asalto comprados por una persona que ahora está presa y que fueron utilizadas en un tiroteo donde murió Brian Terry, agente de la Patrulla Fronteriza estadounidense, en diciembre de 2010 cerca de la línea entre Arizona y México.

Este episodio histórico de la relación bilateral en materia de seguridad, dejó de manifiesto la vulnerabilidad en cuanto al control de la venta y distribución de armamento y las consecuencias que esto puede conllevar para la sociedad civil tanto mexicana como estadounidense.

Cabe recordar que fue durante el gobierno del abanderado por el PAN cuando se le declaró la “guerra” al narcotráfico - hecho con el cual el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), suele recriminar los gobiernos del blanquiazul.

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