Después de la riña al interior del penal de Apodaca, Nuevo León que dejó 6 heridos, una manta fue colocada al exterior del centro penitenciario, en la cual se pidió al director, Javier Navarro, terminar con las extorsiones que se cometen a su interior; tres sujetos fueron identificados como los presuntos autores de estos crímenes por quienes expresaron la denuncia.
“Señor director del Penal de Apodaca te pedimos que por favor ya no permitas al Zeton TOTOY seguir extorsionando a los internos y sus fam.(sic.) Junto con Lanchas y Rodo. En tus manos está la vida de los internos. Ayúdanos por favor a que las cosas cambien”, se leyó en el mensaje.
Familiares de reos que esperaban su turno para ingresar al penal presenciaron cómo sujetos presuntamente armados colocaron la manta durante la madrugada de este lunes, las cuales fueron retiradas por elementos de seguridad del centro penitenciario.
Después de la riña registrada el día viernes 7 de enero, las autoridades del penal decidieron trasladar 94 reos del penal de Apodaca al centro penitenciario de Cadereyta, estrategia con la cual se busca terminar con las presuntas extorsiones y autogobierno de los reos, así lo informó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado.
Según los reportes oficiales este incidente comenzó entre dos personas, quienes entablaron una discusión por temas de extorsión, pleito que subió de tono e involucró de manera repentina a decenas de reos.
Aldo Fasci Zuazua, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Nuevo León, manifestó mediante una entrevista con Milenio que la tensión provocada por la falta de visitas y restricciones que generó la actual contingencia sanitaria correspondiente al virus de Covid-19, ha estimulado un ambiente de estrés entre los reos, lo cual pudo haber causado que las discusiones “menores” terminaran en violencia.
De la misma forma, negó que la riña haya sido provocada por el cambio de régimen de gobierno en el penal, lo cual se generó con la llegada de nuevas autoridades a su dirección, pues ha trascendido que anteriormente los reos ejercían un autogobierno al interior del centro penitenciario, lo cual cambió con la llegada de una nueva directiva al Cereso.
Entre los 26 heridos por el incidente se encuentran familiares y reporteros que cubrían el evento, quienes resultaron con lesiones tras la caída de una reja de seguridad que resguardaba la entrada de visitantes, la cual cayó cuando se presentaba una acumulación de personas al exterior del penal.
Asimismo, se informó que diversos reos resultaron con lesiones tras ser víctimas de golpes y heridas con armas blancas, por lo cual fueron trasladados a hospitales aledaños, en los cuales permanecen custodiados por elementos de seguridad pública estatales.
En una conferencia de prensa ofrecida por el titular de la SSP de Nuevo León horas después del incidente, se expuso que la riña podría haber comenzado por 70 pesos, los cuales eran exigidos por un extorsionador a una víctima, quien prendió fuego a un colchón y originó el incendio que se registró al interior del penal.
Según información oficial, en el enfrentamiento participaron por lo menos cinco bandas rivales, las cuales se disputarían el control de las extorsiones de las cuales son víctimas los internos.
Tras el incidente, las autoridades realizaron una revisión exhaustiva en las inmediaciones del penal, con la cual lograron encontrar latas de jugos y refrescos que contenían bebidas embriagantes o drogas, además de celulares y diversos artículos no permitidos en las inmediaciones penitenciarias.
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