INAH aclaró que no se usó pintura vinílica en el Palacio Postal

Después de varias horas sin respuestas por parte de los organismos del Gobierno Federal, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) negó que se haya usado pintura vinílica en los muros del Palacio Postal, del Centro Histórico de CDMX, luego de que se generaran críticas contra el organismo a través de redes sociales.

El INAH recalcó que todos los procesos que se llevan a cabo en la restauración, cuidado y mantenimiento de edificios están vigilados siempre por las instituciones federales pertinentes. Por otra parte, también resaltó que no se está aplicando pintura vinílica en la fachada, se trata de “una capa de de sacrificio con cal apagada llamada engobe de protección para mantener la cantera integra e ilesa”.

La dependencia federal explicó que desde el 2021 inició un programa para dar atención y mantenimiento a los daños que presentaba el Palacio Postal, el cual incluía un proceso de restauración en la fachada, con el fin de recubrir la roca y protegerla de distintos agentes externos que pudieran dañar la estructura.

Ante esto, también se informó que la intervención del inmueble siempre contó con las debidas autorizaciones y la supervisión del propio INAH. Se comunicó que debido a la ubicación y al valor artístico y cultural del Palacio, se debía dar prioridad a su reparación, pues se encuentra en un lugar muy concurrido de la Ciudad de México.

Posteriormente, se detalló información acerca del “engobe de sacrificio”, la técnica utilizada para el recubrimiento de la cantera. En el comunicado se precisó que dicho método se elabora con distintos materiales naturales como aglutinantes, pigmentos y pinturas a la cal.

Con dicho proceso no se afecta la piedra de cantera, al contrario, se garantiza su restauración óptima, la cual resulta poco dañina y muy efectiva para los fines del edificio. El famoso engobe es una “suspensión de arcilla de consistencia líquida fina” que pigmenta materiales delicados como la cantera.

La técnica fue autorizada por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) para limpiar el exterior del Palacio, el cual se encontraba con grafitis y pintas. También se consideró reponer las molduras que faltan en los herrajes de la puerta principal.

No obstante, también mencionan que como parte de la revisión del procedimiento, las autoridades a cargo del proyecto solicitaron la suspensión temporal de actividades para realizar las pruebas pertinentes que garanticen y validen la aplicación correcta de los materiales.

Se subrayó que se realizarán pruebas cromáticas para tratar de que el nuevo recubrimiento no diste mucho del color original del monumento. De igual forma se exhortó a la ciudadanía a confiar en los proyectos que se llevan a cabo con el único fin de restaurar y conservar el inmobiliario.

Cabe destacar, que las especulaciones de la supuesta pintura vinílica en el inmueble causaron mucha controversia en diversos usuarios, debido a la naturaleza histórica del sitio, la cual resguarda distintos aspectos y elementos importantes para la historia de nuestro país.

Incluso, desde el 4 de mayo de 1987, el Palacio Postal fue declarado Monumento Artístico de la nación. El motivo de esta condecoración fue principalmente por su trayectoria histórica y su particular estilo ecléctico, el cual se encarga de mezclar elementos góticos, del art nouveau, plateresco español y veneciano.

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