En el estado fronterizo de Arizona, Estados Unidos, se decomisa más del 9% de la droga que cada año atraviesa los límites entre México y EEUU.
El agente Kevin Hecht, con más de 20 años de experiencia, en la última década se ha apoyado en la tecnología para frenar el flujo de drogas ilícitas procedentes de México.
Sus herramientas incluyen torres fijas integradas; sensores terrestres; sistemas de vigilancia no tripulados (similares a los drones); sistemas de rayos X, agentes K-9 y robots.
Una de las tareas que tienen que desempeñar los agentes es la limpieza de los túneles utilizados por los cárteles para pasar la droga. Sin embargo, poco a poco los robots han podido tomar más participación en este tipo de labores.
A día de hoy estos autómatas son capaces de inspeccionar los túneles y las tuberías de drenaje para dar un primer vistazo antes de que ingrese uno de los agentes.
“Cada vez que podemos enviar un robot a un túnel en lugar de un agente, es ideal, especialmente cuando hay aguas residuales y suciedad”, declaró Hecht a Cronkite News. “Los robots primero limpian la zona por seguridad y comprueban si hay gases nocivos”.
De acuerdo con la Universidad de Arizona, más de 300.000 peatones y 630.000 vehículos cruzaron la frontera en el sector de Tucson, que se extiende a más de 420 kilómetros desde el límite del estado de Nuevo México hasta el límite del condado de Yuma.
Según los datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), al menos el 9,2% de las drogas que llegaron a través de la frontera terrestre con México durante el año fiscal 2021 pasaron por Arizona.
En 2021 se incautaron 397 kilos de cocaína en la frontera entre Arizona y México, y en octubre —el inicio del año fiscal 2022— se incautaron 238 kilos, según la CBP.
No obstante, aunque la tecnología hace parte del trabajo sucio, los agentes dicen que los cárteles mexicanos se están adelantando.
“Se están volviendo un poco más sigilosos”, aseguró Hecht.
“Hoy en día estamos viendo muchos más narcóticos duros que se contrabandean a través del desierto, donde antiguamente estaban las rutas de la marihuana”, dijo Alan Regalado, agente de la Patrulla Fronteriza desde hace poco más de 10 años. “Ahora las están usando para transportar narcóticos más fuertes”, afirmó.
Desde el año fiscal 2017, la CBP ha recibido más de USD 743 millones para mejorar la tecnología en la frontera. Sin embargo, un informe de febrero mostró que gran parte de esos fondos aún no se han gastado.
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