Carlos Slim o Donald Trump: quién tiene la mayor fortuna, el magnate mexicano o el expresidente de EEUU

El empresario más rico de México lleva por nombre Carlos Slim. Y es que el magnate es dueño de diferentes empresas internacionales como América Móvil y Grupo Carso. Es gracias a su habilidad para llevar a cabo negocios, que Slim, quien tiene ascendencia libanesa pues sus padres eran originarios de ese país asiático, ha logrado acumular una gran fortuna que asciende a USD 55 mil 930 millones, según el último listado de la revista estadounidense especializada en temas financieros Forbes.

Como Slim, hay muchos hombres millonarios al rededor del mundo. Basta mencionar a Jeff Bezos, dueño de Amazon, quien es considerado la persona con más dinero en todo el planeta, con una fortuna que, según Forbes, asciende a USD 201 mil millones, lo que casi cuadriplica la fortuna del magnate mexicano.

Además, hay otras personas que también han logrado acumular grandes riquezas. Uno de ellos es el ahora expresidente de los Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, quien desde el inicio de su mandato como presidente del país más poderoso del planeta, en enero de 2017, presumió de tener mucho dinero.

Sin embargo, la fortuna del magnate estadounidense no se compara en nada a la que tiene el empresario mexicano Carlos Slim. Y es que según Forbes, la fortuna del magnate es de USD 2.4 mil millones de dólares. Esto significa que durante su mandato como presidente, el empresario perdió casi un tercio de su fortuna, pues antes de llegar a la presidencia de EEUU, su fortuna estaba valuada en USD 3.5 mil millones.

Esto quiere decir que el magnate mexicano Carlos Slim Helú supera a la fortuna de Trump por USD 53 mil 530 millones. Una cifra demasiado elevada.

Donald Trump, antes de ser presidente, llegó a declarar a sus seguidores que que su padre le había otorgado un “pequeño” préstamo de USD 1 millón para empezar con sus negocios y su imperio. Sin embargo, Trump además de recibir este préstamo de su padre, también recibió su forma de negociar.

Fred Trump, padre de Donald, quien en las últimas elecciones presidenciales de Estados Unidos, llevadas a cabo en 2020, perdió contra el actual presidente del país vecino del norte Joe Biden, comenzó un negocio de millones de dólares de bienes raíces residenciales en los distritos de Brooklyn y Queens en Nueva York.

Fred era conocido por la calidad de sus construcciones, muchas de ellas aún en pie, y por su austeridad. Regularmente, Fred Trump terminaba las obras con un presupuesto más bajo en proyectos financiados por el gobierno. El sobrante lo guardaba como una utilidad, que aunque era legal, hizo que fuera citado ante el Congreso.

Donald Trump declaró que él decidió pasar de la construcción de viviendas de bajo costo a torres de lujo en Manhattan, sin embargo, hay fuentes que aseguran que que fue su padre quien decidió tomar esta medida.

El primer gran proyecto del que estuvo a cargo Donald Trump fue el Hotel Commodore. Él se asoció con la organización Hyatt para comprarlo en 1976 por un precio que no se reveló, cambiándole el nombre a Grand Hyatt. En ese tiempo, Nueva York no era visto como el lugar de vacaciones de lujo que es hoy, por lo que fue una inversión de gran riesgo para el joven empresario.

Usando sus habilidades de negociación, convenció a la Ciudad de Nueva York de dar al hotel una rebaja de impuestos de 40 años, que le hizo ahorrar USD 160 millones. Para 1996 vendió la mitad del hotel Hyatt por USD 142 millones.

Trump siguió invirtiendo en el desarrollo de construcción de enormes edificios en Nueva York, incluyendo la copra del Hotel Plaza y la compra del antiguo edificio del Banco de Manhattan. El edificio estelar de la compañía es la Torre Trump, un edificio ubicado en la Quinta Avenida de 58 pisos, terminado en 1983. Este edificio sigue siendo la sede de la Organización Trump.

Trump puede afirmar que es un magnate de los bienes raíces, sin embargo, la mayor parte de su patrimonio viene del valor de su marca, la cual comenzó a construir en la década de 1980.

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