El empresario y magnate Carlos Slim es, actualmente, la persona más rica de México, pues según el último listado de la revista estadounidense especializada en temas financieros, Forbes, cuenta con una fortuna que asciende a USD 55,930 millones.
Gracias a esa fortuna, Slim se ha posicionado como uno de los empresarios más importante de México, e incluso, a nivel mundial. Slim también llegó a ser considerado como el hombre más rico del planeta por cuatro años consecutivos, de 2010 a 2013.
La historia personal del magnate está llena de historias que han salido a la luz gracias a las múltiples entrevistas que se le han hecho y a las biografías escritas por periodistas y escritores que se han dedicado a investigar su vida.
Una de las historias que más han destacado en la vida del empresario, ha sido, sin duda, su único matrimonio con Soumaya Domit Gemayel, con quien estuvo casado por más de 30 años, desde 1966 hasta 1999, cuando ella murió debido a problemas renales.
Se sabe que Slim llevaba una buena relación con sus padres, y que incluso quien lo llevó al mundo de los negocios fue su padre Julián Slim Haddad, quien desde muy pequeño lo enseñó a administrar su ingresos y egresos, pues tanto a él como a sus hermanos, les proporcionó una libreta en la que debían de anotar todos los ingresos y egresos que tenían, para que al final de la semana, vieran en qué habían gastado su dinero, y qué habían recibido.
Esto enseñó a Slim a organizarse de manera muy buena.
Aunque Slim era mexicano, pues nació en la Ciudad de México un 28 de enero de 1940, sus padres eran inmigrantes libaneses y llegaron a México a inicios del siglo XX. Ellos también tenían negocios, pues fundaron una mercería en el corazón de la capital, que poco a poco rindió frutos. Además, durante la época de la Revolución Mexicana, se hicieron de propiedades.
Slim, de niño, vivió en la colonia Condesa, hasta los siete años de edad. Posteriormente se mudó al barrio de Polanco, al poniente de la capital, uno de los barrios más exclusivo de la Ciudad de México. Slim vivió frente al Parque Lincoln, en una casa ubicada en el número 51 de la calle Calderón de la Barca, en donde su familia y él conocieron a otras personas que también eran originarias de Líbano, y que vivían a solo unas casas de su hogar.
Se cuenta que un día, Slim acompañó a su madre, quien era amiga de la mamá de dicha familia, y quedó maravillado con la belleza de una de las integrantes de la familia: Soumaya Domit Gemayel, quien posteriormente se convertiría en su esposa por 33 largos años. Soumaya era hija de Antonio Domit y Lili Gemayel, además sobrina del expresidente de Líbano Amin Gemayel.
Cuando se conocieron, en 1964, Carlos Slim tenía 24 años, y Soumaya apenas contaba con 15. Dos años después, en 1966, se casarían. Un dato revelador de la boda entre Slim y Soumaya, es que los casó el padre Marcial Maciel, quien fue fundador de los Legionarios de Cristo, y quien fue acusado de abusar sexualmente de 60 niños.
Luego de casarse, Slim recibió por parte de su madre, Linda Helú, un gran regalo de bodas, pues le obsequió un millón de pesos, dinero que aprovechó para comprar un terreno en Polanco. La costumbre que tiene la comunidad libanesa es construir una casa para la nueva familia, sin embargo, Carlos y Soumaya decidieron construir no una casa, sino un edificio entero, en el que hicieron departamentos. Ellos vivían en uno de los pisos, y los demás departamentos los rentaban, por lo que aprovecharon de buena manera el obsequio de la madre de Slim para generar dinero.
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