Las autoridades ratificaron 392 años de prisión que deberá pagar Juan Manuel Cavazos Lira, el Meme y/o Chemo, ex policía de Nuevo Laredo, Tamaulipas, que participó en el ataque con granadas a un bar en Nuevo León.
En 2017 se informó que este sujeto, identificado como integrante de la pandilla estadounidense Mexican Mafia, solamente recibiría 60 años tras las rejas por el atentado de 2006 en que fueron asesinadas cuatro personas y 27 más resultaron heridas en el centro nocturno Punto Vivo Bar de San Nicolás de los Garza.
Pero dos años después, en octubre de 2019, esa condena se elevó a 392 años por los delitos de homicidio calificado, homicidio calificado en grado de tentativa, portación de arma de fuego y posesión de cartuchos para armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.
Sin embargo, la defensa del Meme interpuso un recurso de apelación y dos meses más tarde de recibir condena, el Primer Tribunal Unitario de Circuito del Centro Auxiliar de la Quinta Región, con sede en Culiacán, Sinaloa, revocó la sentencia condenatoria, ordenando la reposición del procedimiento.
De nueva cuenta se tuvieron que presentar los datos de prueba para acreditar que Cavazos Lira fue uno de los atacantes que participó en acciones violentas que incluyeron el asesinato de dos guardias de seguridad y un par de víctimas más. Tras irrumpir, los sicarios arrojaron granadas de fragmentación y también dejaron casi 30 lesionados.
Así fue como la Fiscalía General de la República (FGR) acató el fallo del juez en Sinaloa y volvió a demostrar con evidencias que relacionaban al Meme. El procedimiento estuvo encabezado por la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada, con apoyo de la Fiscalía Especializada de Control Regional en su delegación del Estado de México.
Tras finalizar el nuevo proceso, el juez de la causa determinó que el ex agente de Nuevo Laredo, Juan Manuel Cavazos Lira, sí deberá pasar casi 400 años encerrado por sus delitos, reportó la FGR este 16 de diciembre, a poco más de 15 años de los hechos.
De acuerdo con las investigaciones, habían pasado tres meses desde que el Meme fue relevado del cargo cuando ejecutó el atentado. Se desempeñaba como comandante municipal en Nuevo Laredo, pero no aprobó los exámenes para seguir en el puesto. Como funcionario colaboraba con la Mexican Mafia.
Los hechos en San Nicolás de los Garza ocurrieron a las 02:40 de la madrugada del lunes 15 de mayo de 2006 en el bar localizado sobre la avenida Ruiz Cortines, perteneciente a la zona metropolitana de Monterrey.
El grupo de hombres armados acribillaron al primer guardia en la puerta y uno más al interior, quienes trataron de impedir el paso de los agresores. Primero dispararon al piso, luego contra los asistentes y finalmente arrojaron los explosivos. Habían arribado en dos vehículos: una camioneta negra Ford Lobo y un Volkswagen Bora color blanco.
Fueron perseguidos por policías locales luego de ejecutar el ataque, pero lograron evadir a las autoridades al cubrir su huida con disparos de grueso calibre. La pandilla Mexican Mafia es aliada de diversos cárteles mexicanos y, actualmente, se ubican sus nexos con el Cártel de Sinaloa.
Oscar Villanueva, Israel Aguilar Rodríguez, René Espinosa Sánchez y Salvador Monarres Ruiz fueron las víctimas mortales. Todos los heridos fueron llevados a hospitales cercanos a Monterrey y siete de ellos salieron de intervención médica por la mañana.
José Natividad González, quien fungía como gobernador de Nuevo León, culpó a la entonces Procuraduría General de la República por no detener a criminales, además, reprochó que no hacía suficiente para erradicar la violencia.
Por la tarde de ese lunes, policías estatales hallaron un Bora blanco con placas XCD-8127 de Tamaulipas con dos fusiles AK-47 al interior, cargadores, una granada y pistolas de calibre 9 mm. Dos meses después del atentado cayó el Meme.
Cavazos Lira fue detenido en julio de 2006 en el Puente Internacional No. 2 de Nuevo Laredo. Previamente, la Agencia Federal de Investigación que lideraba Genaro García Luna detectó que el sospechoso permanecía oculto en Laredo, Texas, de manera ilegal.
De ahí que se solicitó su deportación. Estados Unidos lo devolvió y fue arraigado 90 días en la Ciudad de México, donde posteriormente quedó a disposición del juez Quinto de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en el Estado de México.
Por esa época la entidad neoleonesa y su área metropolitana padecían una serie de enfrentamientos entre el Cártel del Golfo y su brazo armado, los Zetas, contra el Cártel de Sinaloa. Los de Tamaulipas culpaban de la ola de violencia y protección a Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, y a su entonces aliado de los Beltrán Leyva, Edgar Valdez Villarreal, la Barbie.
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