El presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), reconoció la reunión que integrantes de Partido Acción Nacional (PAN) - primera fuerza opositora - sostuvieron con funcionarios del gabinete liderado por Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
“Yo creo que es bueno el diálogo. Que depongan la actitud extremista de rechazar todo. Llegaron a una situación muy negativa (...) Es algo muy bueno el que se dialogue (...) Yo celebro”.
El mandatario afirmó que el encuentro representa una oportunidad para que miembros de la oposición conozcan las razones que sustentan las decisiones federales y, de ahí, decidan si oponerse o no, pero “con elementos”.
“Que tengan más elementos y que actúen pensando en el interés general, en lo que representan, no en el interés partidista. (...) Hay iniciativas que nosotros estamos promoviendo y queremos que se conozcan por qué es necesaria la reforma constitucional en materia eléctrica.
Si ellos consideran de que es contraria al interés nacional, pues entonces, con elementos, pueden decir ‘nos oponemos’”, destacó en su conferencia matutina.
La tarde del 13 de diciembre, se llevó a cabo la primera reunión del poder Ejecutivo Federal con Acción Nacional, en donde Adán Augusto López, Secretario de Gobernación, fungió como representante de López Obrador y su proyecto de la Cuarta Transformación (4T). En tanto, Marko Cortés, presidente nacional de la bancada blanquiazul, acudió como delegado del grupo opositor.
Durante el diálogo se abarcaron los temas de seguridad, salud, energía, economía, democracia y medio ambiente, en virtud de promover estas agendas a detalle; el secretario de gobernación propuso realizar mesas de trabajo que tendrán la finalidad de encontrar coincidencias y analizar las diferencias para fortalecer la unidad nacional.
Por su parte, el panista reiteró que uno de los principales puntos directamente ligado al partido fue que pare la persecución política contra Ricardo Anaya, ex candidato a la presidencia, y Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas.
En ese tenor, López Obrador hizo un llamado - en la mañanera de este martes - al Partido Revolucionario Institucional (PRI) a “hacer lo mismo” que el grupo blanquiazul: “Ojalá que el PRI haga lo mismo, que se dialogue”.
No obstante, tras la reunión, Acción Nacional fue blanco de diversas críticas que lo acusaba de “deteriorar (prostituir, señalaron algunos) la oposición” y “entregarse a Morena”, especialmente, para la aprobación de la controversial Reforma Energética.
A raíz de dicha propuesta de ley (impulsada por López Obrador), el PRI recibió las mismas acusaciones, esto luego que Rubén Moreira, coordinador de la bancada, aclarara que la organización se desapegó del modelo económico neoliberal.
Es decir, el Revolucionario Institucional ya no promoverán las políticas de liberación del mercado, mismas que fueron marcadas y acentuadas por los sexenios de Miguel de la Madrid o Carlos Salinas de Gortari.
Para dejar testigo de este cambio ideológico, el también presidente de la Comisión de Asuntos Frontera Norte en San Lázaro publicó en su cuenta oficial de Twitter que el PRI es socialdemócrata y de centro izquierda.
Esta declaración intensificó la controversial política que el tricolor venía acarreando desde que no planteó una postura definida ante la Reforma, tomando en cuenta que tanto el Partido Acción Nacional (PAN) como el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se mostraron contra la iniciativa de AMLO.
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