Diego Fernández de Cevallos ha sido un duro crítico del poder desde hace décadas. Cuando formó parte del Partido Acción Nacional (PAN) atacó con todo lo que tuvo a los gobiernos priistas de aquellos entonces y señaló las irregularidades de sus contrincantes políticos.
En la actualidad, a pesar de que ya no forma parte de ningún partido político, sus ácidos comentarios y densas reflexiones continúan, ahora contra su enemigo número uno: el gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
No obstante, también ha sabido reconocer cuando la Cuarta Transformación (4T) realiza actos aplaudibles, y esta vez no fue la excepción. Desde la columna de opinión semanal que publica en el diario Milenio, el también abogado celebró al titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Adán Augusto López, por abrir el diálogo con figuras de la oposición.
Para Fernández de Cevallos, que el funcionario público haya recibido a Santiago Creel e integrantes de Acción Nacional la mañana de este 13 de diciembre generó un “camino para hallar las coincidencias y la civilidad que se requieren para enfrentar eficazmente los desafíos nacionales”.
Lo que buscó el diputado blanquiazul fue hacer diferencia y modificar la actitud impositiva de López Obrador, misma que ha utilizado hasta con el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), su militancia y los legisladores para exigirles “aprobar sus iniciativas sin cambiarles ni una coma”.
Sin embargo, debemos recordar que todo poder enloquecido es inexorablemente débil, y que la prepotencia suele ocultar la impotencia
Asimismo, el “Jefe Diego” enlistó dos cualidades que el mandatario federal no posee: “su experiencia política, y que privilegia las buenas maneras”, las cuales, señaló, comparte con Santiago Creel, por lo que dejaron a un lado la " incapacidad ontológica del ‘austero’ y ‘republicano’ para dialogar” con el único objetivo de buscar un bien común para México.
Uno de los aspectos por los que el ex candidato presidencial del PAN celebró esta reunión entre la 4T y la oposición fue debido a la “rectificación” que tuvo esta administración para abrirle las puertas al oponente político y así lograr un “diálogo constante y franco de gobernantes y gobernados”, dijo, pues “sin rectificar, lo peor está por venir, con éste y con gobiernos futuros”.
A Fernández de Cevallos también le sorprendió que una de las figuras más cercanos a AMLO haya tomado esta decisión, ya que la “cizaña” y el “vómito de veneno” que se esparce desde Palacio Nacional día con día generan “sumisos y atolondrados” en el país.
Esta situación no sólo afecta la esfera política, también a la sociedad en general, por lo que decanta en el aumento de " la incivilidad, la pobreza, la inseguridad y las demás formas de barbarie, para tragedia de todos, principalmente de los desposeídos”.
“Mientras el deporte preferido sea violar la ley, y su Alteza Pequeñísima acapare las medallas de oro, las monedas para ‘triunfar’ seguirán siendo el egoísmo, la ventaja injusta y el delito. Para muchos la honestidad es hoy despreciada, y al mencionarla solo exhiben su cinismo. Lo importante es estar arriba, así sea sin escrúpulos, porque la sociedad les perdona y aplaude”, ahondó.
Finalmente, destacó que este tipo de diálogos sin exclusiones son sumamente necesarios para conocer las diferencias de todos. Además, aclaró que en caso de que los encuentros no generen algún acuerdo, ya no será por la “cerrazón” de ambas partes, sino por las diferencias encontradas en una discusión abierta.
“Si algo se logra con esos diálogos, será ganancia; de lo contrario, que no sea porque hubo cerrazón de todas las partes. No solo está en juego el destino de un enfermo delirante, sino el futuro de la nación, y la responsabilidad es de todos”, sentenció.
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