La tarde del pasado martes 7 de diciembre, en un camino rural de Tonalá, Jalisco, fueron localizados los cuerpos de dos hombres con presuntas huellas de tortura y heridas de bala, envueltos con plástico transparente y bolsas en la cabeza. Uno de ellos fue identificado por las autoridades como Otoniel González Ramírez, antiguo escolta del fallecido ex gobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval.
El otro cadáver fue identificado como Arturo Sánchez Íñiguez, un ex oficial que trabajaba en la Unidad para la Recuperación del Estado de Derecho y la Paz (Urepaz) de la Comisaría de la Policía de Guadalajara. Ambos fueron dados de baja en 2019, confirmó la Secretaría de Seguridad del Estado.
Los dos cuerpos fueron encontrados en un camino que conduce al poblado El Vado, a la altura de la colonia Las Palmas. A Otoniel González se le conocía en el gremio policial como Delta 1 y estuvo al frente de la Comisaria Regional de la extinta Fuerza Única (FU) de Jalisco, reportó el periódico Reforma. Sin embargo, fue cesado de la corporación el 18 de junio del 2019 por varias irregularidades.
Presuntamente estuvo involucrado en una trifulca entre elementos de la Policía de Guadalajara y la Policía del Estado, a raíz de la detención de un hombre —presuntamente su sobrino— en Balcones de Oblatos, en 2017. Además, supuestamente habría ordenado el “levantamiento” de un locatario en Tonalá. En 2011, la Comisión Estatal de Derechos Humanos emitió la recomendación 55/2011 tras encontrarlo responsable de cometer faltas a los derechos humanos durante diversas detenciones de sospechosos. Incluso se le vinculó con una banda de roba carros que operaba en el área metropolitana de Guadalajara.
También fue escolta del secretario del Trabajo y Previsión Social en Jalisco, Marco Valerio Pérez Gollaz.
Ese mismo día fueron encontrados los cuerpos de otros dos ex policías de Jalisco en el municipio de Tlaquepaque, en la colonia Solidaridad. Uno fue identificado como Alejandro Hernández Soto y el otro —según versiones extraoficiales— como Edwin Alexis González Ballestero, hijo de Otoniel González Ramírez y policía de Guadalajara que también había sido dado de baja en 2019 por constantes incapacidades, informó El Occidental. Los cuerpos fueron dejados en el cruce de la Privada Managua y Privada Tepame.
El ex gobernador del estado de Jalisco (2013-2018), Aristóteles Sandoval, miembro del Partido Revolución Institucional (PRI), fue asesinado a balazos la madrugada del 18 de noviembre en un bar de Puerto Vallarta, Jalisco.
El miércoles, el fiscal del estado, Gerardo Octavio Solís Gómez aseguró que la investigación está en proceso de probar que delincuentes ligados al crimen organizado privaron de la libertad al ex mandatario.
Asimismo, aseguró que, la dependencia que dirige, está coordinada con autoridades de todo el país, por lo que “Se está trabajando intensamente en su búsqueda. Traemos colaboraciones en toda la república”, afirmó.
A pesar de que ya ha pasado casi un año del incidente, todavía no se tiene identificado el móvil del asesinato o al autor intelectual, pues según el fiscal, esto se determinará cuando se capture a los autores materiales del crimen.
El pasado 23 de noviembre, el actual gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro aseguró que el caso de Aristóteles Sandoval está prácticamente resuelto:
“En el caso de mi antecesor, como lo ha informado la Fiscalía, se ha identificado ya a los responsables y se han girado órdenes de aprehensión. Es un asunto que está resuelto en términos de quienes son los responsables y se están buscando esperando poder detenerlos y hacer justicia”, aseguró Alfaro.
El jefe de plaza del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Puerto Vallarta, Carlos Andrés Rivera Varela ha sido señalado por diversas fuentes como el probable responsable del asesinato de Aristóteles Sandoval, pues el criminal nacido en Cali, Colombia también habría atentado en contra de Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, el pasado 26 de junio de 2020.
Rivera Varela ha sido catalogado por el Departamento del Tesoro del gobierno de Estados Unidos y la agencia antidrogas de aquél país como uno de los miembros más importantes del CJNG, así como de los más peligrosos del país.
Su cercanía con Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho” lo ha hecho acreedor a la plaza de Puerto Vallarta, lugar que se considera como el punto más importante del país para la organización criminal, pues desde este lugar se organizan movimientos financieros y ajustes en el cártel.
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