El hacinamiento en los penales de México ha llegado a una crisis de 15 o más personas por celda en penitenciarías estatales, mientras que el auto y cogobierno aún prevalecen en el centro del país.
Según la encuesta la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL) 2021, la mitad de presos en 32 estados de México compartieron su celda con más de cinco reclusos. Pero el 13.3% ha estado encerrado con más de 14 reos.
Aunado a ello, alrededor de 80 mil 700 internos e internas señalaron (36.7%) actividades de auto y/o cogobierno del centro carcelario.
La mayoría de Población Privada de la Libertad (PPL) indicó que estos casos suceden frecuentemente en el Estado de México (61 %), la Ciudad de México (60.2%), así como en Querétaro (52.3%).
Esta encuesta fue realizada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) entre julio de 2020 y julio de 2021, con el proposito de generar información relevante sobre las condiciones de procesamiento e internamiento de la población de 18 años y más que legalmente ha sido privada de su libertad.
De todas las PPL’s en México, unas 29 mil 260 se han mantenido en extremos de hacinamiento por compartir el espacio con 15 reclusos o más.
A eso se agregan 24 mil 640 que estuvieron encerrados con 11 o 14 personas; además de 48 mil presos y presas que estuvieron entre cinco y nueve presidiarios.
En el Estado de México el 87.8% de presos conviven y duermen con más de cinco personas en una celda. En Baja California el 81.3% están en esa misma situación.
Mientras que en Puebla el porcentaje es de 65.1%; en Jalisco 62.4%; y en la Ciudad de México el 53.8 por ciento, cuando la media nacional es de 46.4 puntos porcentuales en esa proporción de PPL’s por habitación.
Los centros carcelarios de Baja California registran casi el 100% entre población que está encerrada con cinco personas o más. En el penal del Hongo II esa proporción es de 99.4%, mientras que en el Cereso de Mexicali el 96.3% de los reos comparte espacio con cuatro más. En Tijuana el registro para el mismo indicador es de 89.7 por ciento.
La Comisaría de Reinserción Femenil de Jalisco apunta a datos similares, pues ahí, el 99.4% de las internas están en celdas con cinco compañeras. Para la Ciudad de México, el Reclusorio Oriente destaca en la misma densidad poblacional carcelaria con 84.9 por ciento.
Pero en el Estado de México, los indicadores más representativos están en los Ceresos de Cuatitlán con cinco personas por espacio en un 98.4%; Chalco Mixquic 98.2%; Tlalnepantla 98.1%; y Ecatepec 97.8 por ciento.
Las PPL’s respondieron que entre las situaciones de autogobierno resaltan el manejo de llaves de las celdas, pues el 23.5% respondió haber visto eso en los 12 meses contemplados en la ENPOL 2021. Mientras que el 16.2% declaró que se han suscitado riñas por el control del penal.
Además, 14.1% respondieron que entre reos se asignan celdas; 13.3% observó vigilancia de las mismas por sus compañeros y no por custodios y 12.2% notó el cobro a internos por bienes y servicios; el 11.5% observó la imposición de sanciones; 11.2% la protección a otros internos.
No solo eso, al menos 22 mil entrevistados denunciaron que se les negó permitir en talleres. Llamadas telefónicas negadas, así como el servicio médico, actividades deportivas o escolares también estuvieron a cargo de presos y no de autoridades.
Durante 2021, 25.9% de la población privada de la libertad se sintió insegura en el centro penitenciario, mientras que 34.1% fueron fue víctimas de una conducta ilegal al interior del centro penitenciario. De esta población, 87.7% sufrió el robo de objetos personales y 4.6% fue víctima de hostigamiento sexual.
El porcentaje de población que sufrió de actos de corrupción en al menos una de las etapas del proceso penal desde su detención hasta la realización de su juicio y vida intracarcelaria fue de 36.2 por ciento.
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