Juan Carlos Valencia González, hijastro de Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, comenzó en el mundo delincuencial apenas cumplió la mayoría de edad, de acuerdo con registros judiciales en la Corte del Distrito de Columbia, y ahora es buscado con una recompensa de 5 millones de dólares.
Según ha informado el Departamento de Estado de Estados Unidos, Valencia González es hijo de Rosalinda González Valencia, quien mantuvo una relación previa antes de conocer al actual líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). El R3, como es conocido en el mundo criminal, nació en 1984 y 23 años más tarde ya se le ubicaba como supuesto narcotraficante, de acuerdo con la Administración del Control de Drogas (DEA).
Pero no fue sino hasta el 8 de octubre de 2020 que un Gran Jurado emitió dos cargos en su contra, pues desde 2007 conspiró con otros para importar más de cinco kilogramos de cocaína y 500 gramos o más de metanfetamina a los Estados Unidos desde un país extranjero. Los documentos judiciales también alegan que Valencia González portaba, usaba y poseía un arma de fuego para promover su tráfico de drogas.
La acusación consultada por Infobae México registra que el caso del R3 fue asignado a la jueza Beryl A. Howell dos días después de que fuera aprobada por el jurado. Presuntamente, el operador del grupo criminal siguió en actividades delictivas durante esos años y desarrolló su carrera cuando aún no se fundaba formalmente el llamado cártel de las cuatro letras.
En 2007 aún se mantenía la Federación, concilio de narcos en que actuaban bajo un esquema de coordinación y respeto a fronteras y territorios. Ahí estaban el Cártel de Sinaloa, los Beltrán Leyva y el Cártel de Juárez. Para ese entonces, los antecedentes del CJNG se ubicaban del lado de sinaloenses como Ignacio Coronel Villarreal, quien estaba asociado al Cártel del Milenio y los Valencia.
Para combatir a los Zetas, brazo armado del Cártel del Golfo, el Cártel de Sinaloa encomendó la creación de un grupo de sicarios en 2007 que después derivaron en el Cártel Jalisco Nueva Generación. Los Matazetas se independizaron en 2010, tras el abatimiento en Guadalajara de Nacho Coronel por parte del Ejército.
Pero no fue sino hasta 2013 que anunciaron públicamente el rompimiento y desde entonces el Mencho ya era máximo dirigente de la mano de la familia de sus cuñados, los Valencia o los Cuinis. Este grupo se consolidó desde Michoacán, Jalisco y Colima, siendo uno de los precursores de la fabricación de drogas sintéticas como metanfetaminas que impulsó Coronel Villarreal.
“Desde agosto de 2013 o alrededor de esa fecha, y a partir de entonces, hasta e incluyendo el fecha de presentación de esta Acusación, siendo ambas fechas aproximadas e inclusivas, el imputado JUAN CARLOS VALENCIA-GONZALEZ, también conocido como “Pelón”, “Tricky Tres”, “03″, “El 3″, “JP” y “Pelacas” utilizaron a sabiendas e intencionalmente, y portar una o más armas de fuego, durante y en relación con uno o más tráfico de drogas”, señala la acusación del caso No. 20-cr-216.
Cuando se conoció que los Matazetas ya operaban con independencia del Cártel de Sinaloa, la Corte del Distrito de Columbia ubicó el segundo cargo contra el hijastro del Mencho. Para entonces, el R3 ya tenía 29 años y presuntamente, había forjado su experiencia en el crimen organizado junto con sus tíos y padrastro.
El pasado 20 de julio de 2020, durante la conferencia matutina diaria desde Palacio Nacional, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, analizó unos videos que mostraron el poder del Grupo Élite CJNG, brazo armado de la organización de las cuatro letras, el cual estaría liderado por Valencia González.
Durante su participación, el funcionario público detalló que esta célula delictiva nació en el 2019 y, hasta el año pasado, contaba con presencia en los estados de Michoacán, Guanajuato y Zacatecas. Según la inteligencia militar, el R3 encabezaría este brazo armado junto con Ricardo Ruiz Velazco, alias el Doble R, el R2 y/o el Tripa, quien comenzó su carrera delictiva en Jalisco, aunque más tarde decidió incursionar en Michoacán y terminó extendiéndose a Guanajuato y Zacatecas.
El objetivo de los sicarios es disputar varios territorios con el Cártel Santa Rosa de Lima, entre ellos Guanajuato, Zacatecas, Querétaro; también para hacerle frente a los Viagras en Michoacán y a la Familia Michoacana.
Si Valencia González es declarado culpable de las acusaciones el gobierno de Estados Unidos buscará decomisarle todas las propiedades que constituyó o derivaron de cualquier ilícito, ya sea que las haya obtenido directa o indirectamente. Lo mismo que sus bienes relacionados con la comisión de delitos o facilitarlos.
“El CJNG es una de las organizaciones de narcotráfico más violentas y prolíficas de México, que ha estado inundando los Estados Unidos con fentanilo y metanfetamina, provocando la sobredosis y la muerte de innumerables estadounidenses”, ha dicho la administradora de la DEA, Anne Milgram, al respecto de la recompensa por González Valencia.
Reportes de la agencia norteamericana indican que el caso contra este sujeto forma parte de la Operación Pinky y Cerebro. Tras la recompensa anunciada también se indicó que el hijastro del Mencho es conocido por los alias de Pelón, Tricky Tres, O3, el 3, JP y Pelacas.
Nació cuando su madre Rosalinda trabajaba como indocumentada en los campos agrícolas y haciendo limpieza en California, Estados Unidos. La mujer llegó a ese estado cuando tenía 14 años, dato que confirmó en una carta enviada a la Corte de Columbia para rogar al juez que no fuera severo en la condena de su hija, Jessica Johanna.
Ahí, dos años después de nacido Valencia González, la familiar del grupo criminal conoció al Mencho, de quien se enamoró y por el que abandonó EEUU para casarse y vivir a la sombra de la organización criminal.
La búsqueda contra el vástago de Rosalinda González Valencia está encabezada por la DEA en su división de campo de Los Ángeles, California. Aunque también participa el Grupo de Trabajo contra el Crimen Organizado y el Control de Drogas (OCDETF). Además de la Sección de Estupefacientes y Drogas Peligrosas de la División Criminal junto con los fiscales Kirk Handrich, Kate Naseef y Kaitlin Sahni.
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