Por ser altamente adictivos y ocasionar graves daños a la salud, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) emitieron este viernes una alerta sanitaria por el uso de productos comúnmente denominados “vapeadores”, en todas sus modalidades.
A través de un comunicado, ambas dependencias señalaron que estos productos emergentes son distinguidos popularmente en dos categorías: los cigarros electrónicos (E-cig), también conocidos como “vaporizadores”, y los productos de tabaco calentado.
Sin embargo, todos los dispositivos de este tipo contienen niveles importantes de metales como cadmio, níquel, plomo, entre otros, que son dañinos para la salud, ya que incluyen derivados de compuestos carcinógenos, sustancias tóxicas y emisiones en forma de aerosol.
Las comisiones advierten sobre los riesgos de consumir estos productos, destacando que un cartucho que contiene 5% de sal de nicotina es equivalente a entre uno y tres paquetes de cigarrillos. Estas altas concentraciones de nicotina tienen efectos adversos a largo plazo en el desarrollo del cerebro de niños, niñas, adolescentes y fetos en formación.
Como parte de la alerta, las autoridades sanitarias señalaron tres principales tipos de daños a la salud asociados con estos productos, los cuales son:
- Daños respiratorios por la inflamación del tejido pulmonar, causando padecimientos como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma y cáncer.
- Daños cardiovasculares por los cambios en la circulación sanguínea, los cuales pueden causar arterioesclerosis e infartos al corazón.
- Daños mutagénicos que aumentan el riesgo de cáncer y alteraciones a nivel reproductivo, como disfunción eréctil.
Por su parte, la Secretaría de Salud señaló que ningún vapeador o calentador de tabaco cuenta con autorización sanitaria por parte de Cofepris, ni reconocimiento como productos de riesgo reducido o alternativo que auxilie a disminuir o erradicar el consumo de tabaco.
Finalmente, tanto Cofepris como Conadic recomendaron a las personas no adquirir ni consumir este tipo de productos, ya que también representan un riesgo para la salud de terceros.
En tanto ponen a disposición personal especializado en psicología y medicina a través de los Centros de Atención Primaria a las Adicciones, Centros de Integración Juvenil A.C., Centros de Salud Mental Comunitarios, Centros Integrales de Salud Mental o llamando a la Línea de la Vida al 800 911 2000, para recibir mayor información.
Con siete votos a favor, el pasado 19 de octubre la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió que la prohibición absoluta en México de los cigarros electrónicos y vapeadores es una medida desproporcionada e inconstitucional.
Algunos votos concurrentes estuvieron relacionados a la violación de la libertad de comercio y al libre desarrollo de la personalidad; si la prohibición es por temas de salud se debe regular desde otras políticas.
Hasta septiembre pasado, la organización México y el Mundo Vapeando (Mexvap) compartió que suman casi mil amparos de consumidores para poder tener un acceso legal a los vapeadores, como una medida para dejar el cigarro, pero de estos solo se han resuelto 16.
De acuerdo con estimaciones de Mexvap, el 35% de los usuarios de vapeo, que en su total asciende a un millón de personas, regresaron a fumar cigarro por la prohibición, pues los consumidores temen que se les complique o no puedan encontrar productos ilegales.
SEGUIR LEYENDO: