El Día de Muertos es una fecha icónica para los mexicanos, pues todos tienen a un ser querido a quien suelen recordar al momento de montar la ofrenda o cuando lo visitan en el cementerio en donde se le dio el último adiós.

Este lugar es donde descansan miles de personas que fallecieron por diversas causas y cuyo paso por esta vida es honrado por quienes asisten al ritual, es decir, el entierro que suele ser ya una costumbre en México.

En el panteón San Rafael de la Ciudad de México (CDMX), existen tres mujeres sepultureras, únicas en México, quienes se encargan de enterrar a los difuntos, limpiar las lápidas o prepararlas para el momento final.

Las funerarias las llaman “Camilitas”, ya que son las encargadas de encaminar las almas al cielo.

Se iniciaron en el oficio en la década de los 80 en el Panteón Tarango como voluntarias encargadas de instalar servicios básicos.

Fue así que los trabajos que en algún momento fueron exclusivos de los hombres, pasaron a ser realizados por ellas, cuando fueron contratas por la entonces delegación Álvaro Obregón, para excavar fosas y sepultar difuntos en el panteón San Rafael.

Si bien en un inicio los hombres no creyeron que las mujeres podrían realizar las mismas tareas que ellos en un cementerio, con trabajo y dedicación las llamadas “Camilitas” demostraron que sí tienen la capacidad para hacerlo.

En el camposanto hicieron su vida, pues es el lugar en donde pasan la mayor parte del tiempo y en donde crecieron los hijos de algunas.

Su jornada inicia a las 7 de la mañana y termina a las 3 de la tarde, entre sus actividades está limpiar las lápidas, pisos y alistar la fosa en donde se llevará a cabo el servicio.

Es así que este oficio requiere de mucha fuerza física, para desmontar monumentos, hacer la fosa y ayudar en el traslado del ataúd, así como de fuerza emocional cuando están en medio de un servicio funerario.

Aunque al principio sentían temor por trabajar en un lugar en donde la muerte es la protagonista, ahora esperan con emoción el Día de Muertos, luego de que el cementerio fue cerrado el año pasado a causa de la pandemia por COVID-19.

La razón de su entusiasmo es que se trata de una fecha especial, en la que el panteón se viste de flores, de Cempasúchil en su mayoría, por las personas que visitan a sus seres queridos.

Alebrijes, carros alegóricos, catrinas, calaveras y de más serán los protagonistas del desfile del Día de Muertos, que de acuerdo con el gobierno que preside Claudia Sheinbaum, el tradicional desfile internacional del Día de Muertos “celebrando la vida” comenzará el próximo domingo 31 de octubre en el corazón de la CDMX y se prevé un recorrido de 8.7 kilómetros.

Con la participación de más de mil voluntarios y en honor a las víctimas que murieron por la enfermedad de COVID-19, este magno evento abarcará al menos cuatro segmentos que son: Tenochtitlan-Corazón de México; Ciudad de México hoy; Magia y Tradición; y Celebrando la Vida.

El recorrido iniciará el próximo domingo 31 de octubre a las 12:00 horas, en medio de un protocolo de medidas sanitarias.

Mientras que su ruta comenzará en el Zócalo, pasará por el 5 de mayo, seguirá por Avenida Juárez y Paseo de la Reforma para concluir en Campo Marte.

Los organizadores prevén una duración de al menos cinco horas y durante todo el recorrido se tendrá música en vivo, por lo que el público apreciará el mismo espectáculo desde cualquier punto.

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