Este viernes, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) informó sobre el rescate que se llevó a cabo el 7 de octubre, en el cual, 652 personas migrantes que se encontraban hacinadas y sin ventilación en tres tráileres.
De acuerdo con la institución, tanto la SEDENA como elementos de la Guardia Nacional, Ejército Mexicano y el Instituto Nacional de Migración (INM) colaboraron para que estas personas que eran de diversas nacionalidades y que se encontraban en Hidalgo, Tamaulipas.
Se puntualizó que todo ocurrió cuando las tropas del Ejército Mexicano ubicadas en el Puesto Militar de Seguridad “Oyama” se dispusieron a revisar tres camiones con doble semirremolque, no obstante, al momento en que se acercaron los elementos a los vehículos, se percataron de voces al interior de las cajas.
Ante esta situación decidieron realizar una exploración a través de rayos gama y detectaron que había personas adentro que estaban siendo transportadas en condiciones de hacinamiento.
Después de asegurar el área, los agentes del INM efectuaron un registro de las personas e identificaron que “564 procedentes de Guatemala, 39 de Honduras, 28 de Nicaragua, 20 de El Salvador y uno de Brasil; entre ellas, 349 niñas, niños y adolescentes, de los cuales 198 viajaban solos”.
Por ello, el Ejército Mexicano puso a disposición de las autoridades a cuatro personas que presuntamente podrían ser traficantes de personas. Asimismo, la Guardia Nacional resguardó a las personas encontradas y las trasladó a la Secretaría de Seguridad Pública de dicho estado para que fueran atendidas.
Durante la noche del jueves pasado, se dio a conocer que el INM rescató a más de 800 migrantes centroamericanos que viajaban en seis contenedores de refrigeración y que eran transportados de manera ilegal por tres tráileres.
Antes de que los choferes se fugaran, los vehículos pesados habían cruzado por un retén militar ubicado en el kilometro 52 de la carretera nacional Victoria-Monterrey, en el Ejido Oyama de Hidalgo, en el estado mexicano de Tamaulipas.
Los uniformados le pidieron a los conductores que bajaran de las unidades para comenzar el chequeo de rutina, pero al ver la situación optaron por huir. Segundos después, se abrieron los contenedores para descubrir a los migrantes.
En el interior de los contenedores había al menos 800 migrantes de origen centroamericanos entre hombres, mujeres y niños quienes fueron asegurados por personal del INM, quienes le solicitaron alguna documentación para que comprobarán su estancia legal en el país.
Posteriormente de que fueran detenidos fueron trasladados, en los tres tráileres doble remolque a la Fiscalía General de la República (FGR) delegación Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Además, el pasado 3 de octubre, un grupo de 12 personas migrantes, originarias de Brasil, fue abandonado por su pollero en la ciudad de Tijuana, en la entidad federativa de Baja California. Un pollero, o también conocido como coyote, es una persona dedicada al tráfico de personas o a cruzar migrantes por la frontera con Estados Unidos.
Los brasileños fueron “rescatados” por la administración municipal e instalados en un hotel. Montserrat Caballero, alcaldesa electa de Tijuana, envió instrucciones para ayudar al grupo de personas, conformado por seis adultos y seis menores de edad.
Padres e hijos “deambulaban extraviados por la zona este de la ciudad”, señaló en un comunicado de prensa el Ayuntamiento de Tijuana.
López Montes, titular de la Secretaría de Bienestar, examinó las condiciones físicas de los migrantes y su estado de salud. Después, resguardó al grupo en un hotel de la Zona Centro de Tijuana, donde les suministraron artículos de higiene personal, alimentos y atención médica, según el reporte oficial.
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