Miguel Ángel Carmona Dávila, quien se desempeñaba como agente de la Fiscalía de la Ciudad de México, tiene un historial ligado al crimen capitalino que lo llevó tras las rejas por haberse aliado con células delictivas que debía combatir, como la Unión Tepito.
Conocido por el alias de Licenciado Carmona, este detective de 48 años fue detenido en posesión de drogas y armas, pues se le identifica como líder de una facción criminal dedicada al narcomenudeo y préstamo de dinero con cobro de intereses excesivos: el método Gota a gota operado por estafadores colombianos.
De acuerdo con las investigaciones, Carmona Dávila colaboraba con los extorsionadores sudamericanos que, a su vez, son ubicados como brazo operativo de la Unión Tepito, la organización criminal conformada en 2010 y con mayores alcances para delitos que incluyen secuestro, asesinatos, cobros de piso y venta de drogas en la Ciudad de México.
El Licenciado Carmona fungía como abogado para liberar a los colombianos detenidos por diversos delitos, en una especie de despacho delincuencial.
En el domicilio donde fue arrestado, en la colonia Unidad Habitacional Vicente Guerrero de Iztapalapa, el agente ministerial atendía a los clientes extranjeros junto con un colaborador de confianza. Ese espacio también era utilizado para realizar facturas y emitir credenciales falsas.
El detective fue asegurado junto con Nataly Moreno Rojas, de 32 años de edad. Versiones preliminares indicaron que les fueron localizadas al menos cinco armas cortas, 200 dosis de cocaína, 250 de crystal, una granada, motocicletas y teléfonos celulares.
Miguel Ángel Carmona Dávila es un agente más de aquellos vinculados con la Unión Tepito en la capital del país, ese nexo no es novedoso. Sin embargo, ya había sido detenido el 22 de diciembre de 2017 y fue vinculado a proceso seis días después por las mismas protecciones a colombianos que operan el esquema Gota a gota.
Cayó en prisión, fue procesado, quedó libre y volvió a su empleo en la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, donde se ha desempeñado al menos desde el año 2000. Hasta la última semana estaba adscrito al área de Seguridad Técnica y Escoltas, de donde fue suspendido y se busca, sea destituido.
El Licenciado Carmona fue identificado como integrante de la red corrupta en que participaba junto con sus hermanos Felipe y Gabriel Carmona Dávila. Gabriel era ubicado desde entonces como líder de la organización y también habría trabajado como agente policial.
Mientras que Felipe Carmona Dávila, el Pollo, fue asesinado en febrero de 2016 en calles de Iztapalapa. Sicarios del Cártel de Tláhuac ejecutaron al ex policía ministerial del Estado de México porque extorsionaba a delincuentes al mando de Felipe de Jesús Pérez Luna, el Ojos, haciéndose pasar por elemento activo.
Entre quienes ultimaron al Pollo estuvo Miguel Ángel Pérez Ramírez, MK y/o Micky, hijo del Ojos. El vástago del cabecilla criminal cayó en Acapulco, Guerrero, en mayo de 2017, un par de meses antes de que Pérez Luna fuera abatido en su bastión criminal de Tláhuac.
El MK ejecutó al ex agente ministerial en la misma colonia de Iztapalapa donde este 6 de octubre reciente fue detenido el Licenciado Carmona.
Desde hace cuatro años, Miguel Ángel Carmona Dávila estaba acusado de amenazar a los deudores para que pagaran a prestamistas colombianos, bajo advertencia de ser atacados a balazos. Ahora se ha añadido que coaccionaba a sus propios compañeros en la Policía de Investigación y la Secretaría de Seguridad Ciudadana para favorecer a la célula delictiva.
Presuntamente, los Carmona Dávila operaban para una lideresa colombiana identificada como Ángela Adriana Álzate Ayala, Angie, quien encabezaría la red de prestamistas en Tláhuac. De esta mujer no hay mayores datos sobre su captura y se presume que sigue en libertad.
La estafa conocida como Gota a gota consiste en prestar cantidades con intereses excesivos, montos que luego son requeridos a través de presiones, amenazas o golpizas. Los integrantes de la organización delictiva en la capital del país llegan en grupo a cobrar el dinero y se aliaron con la Unión Tepito.
Esta operación delictiva está diseñada para incrementar la deuda hasta una cantidad que supera el triple de lo conseguido inicialmente. Los colombianos han expandido el método a diversos países como Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Guatemala, Honduras y Panamá.
Se extendió rápidamente entre pequeños comerciantes que no acceden a un crédito bancario, porque ofrece préstamos desde mil hasta 60 mil pesos de manera fácil, en unas pocas horas y sin necesidad de un fiador o una garantía, salvo algún documento de identidad.
Aunque algunos de los implicados han caído tras las rejas, la banda no ha sido desarticulada por completo en la Ciudad de México, pues como queda demostrado en la detención del agente de la fiscalía, escalaron a redes de protección entre autoridades ministeriales.
Uno de los líderes de la organización criminal más relevantes fue detenido el 5 de agosto pasado en una casa de la colonia Xoco, alcaldía Benito Juárez. Se trata de José Alejandro Moreno Licea, el Tesoro, señalado como supuesto nexo entre los extorsionadores y la Unión Tepito. Las investigaciones derivadas de este sujeto llevaron a la detención del Licenciado Carmona.
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