Palacio de Axayácatl: localiza el recinto donde se hospedó Hernán Cortés y murió Moctezuma

En el Zócalo de la Ciudad de México, a un costado de lo que hoy es la Catedral Metropolitana y enfrente del Palacio Nacional, actual residencia del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador (AMLO), se encuentra el Nacional Monte de Piedad, que se alberga en uno de los edificios más emblemáticos de Centro Histórico.

Sin embargo, en ese lugar, durante la época en la que la capital se llamaba Tenochtitlan y era habitada por la cultura Azteca, existió un palacio, en el que ocurrieron eventos importantes que marcarían un antes y un después en la historia del país.

En ese lugar existió el Palacio de Axayácatl, llamado así porque fue el Palacio del padre del emperador Moctezuma II, quien llevaba el mismo nombre del palacio: Axayácatl. Él gobernó México Tenochtitlan entre 1469 y 1481.

En dicho recinto murió Moctezuma, posiblemente, el 29 de junio de 1520. También en ese lugar fue en donde Hernán Cortés se hospedó a su llegada a México-Tenochtitlan. En el Palacio de Axacáyatl, también los conquistadores españoles, al hospedarse ahí y pedir que se les permitiera poner un altar católico, descubrieron una puerta secreta, en donde se escondía el famoso Tesoro de Moctezuma, con el cual trataron de huir en la llamada Noche Triste, cosa que no lograron, pues el tesoro se perdió. Se desconoce, hasta la fecha, el paradero de esa gran riqueza.

Solo se sabe que en la década de los años 80 del siglo pasado, un hombre encontró, muy cerca de lo que hoy es la Alameda Central, en el centro histórico de la Ciudad de México, una barra de oro de unos 2 kilos a 5 metros bajo la tierra, que al estudiarse por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se supo que fue fundido entre 1519 y 1520, por lo que se cree, esa pieza perteneció al Tesoro de Moctezuma.

Es importante mencionar que el Palacio de Axayácatl, también conocido como las Casad viejas de Axayácatl, no estaba conformado por una sola edificación, sino que eran un complejo de edificios. El edificio principal de este complejo, estaba situado en el edificio que hoy ocupa el Monte de Piedad, lugar en el que habría espacios arbolados y distintos patios.

Luego de que los españoles ocuparan ese lugar como residencia desde su llegada, el 22 de mayo de 1520 abandonaron el espacio, tras un ataque mexica motivado por la Matanza de Tóxcatl, por lo que fue incendiado el edificio y el intento de emboscada mexica. Por este hecho fue por el que huyeron al poniente de la capital mexica, sobre la calzada Tlacopan, ahora conocida como Tacuba. Este hecho también fue registrado en la Noche Triste.

En 1521, ya cuando los españoles habían consumado su conquista, el edificio fue demolido hasta sus cimientos, usando las piedras de las ruinas de este para construir unas casas que había ordenado Cortés que se edificaran.

En esa construcción, además de ser la residencia de Cortés, se realizaría la primera sesión del primer cabildo de la Nueva España en 1525 y la sede del Marquesado del Valle de Oaxaca, institución dada a Cortés luego de sus actividades de conquista. En ese mismo lugar se instalaría el primer reloj de la nueva capital, dando origen al nombre de la calle de enfrente del edificio, llamada Rélox, actualmente conocida como Monte de Piedad. Ese edificio fue la casa de los dos primeros virreyes novohispanos, Antonio de Mendoza y Luis de Velasco.

El cabildo ocupó un nuevo edificio en 1562 en el actual Palacio Nacional. Fue hasta 1836 que el predio que ocuparan estas edificaciones fue dado al Sacro Monte de Piedad, actual Nacional Monte de Piedad.

En julio de 2020, especialistas del INAH descubrieron vestigios del palacio prehispánico, y de los restos de la casa que Cortés mandó a construir tras su derrumbe. Los descubrimientos fueron hechos durante intervenciones arqueológicas encabezadas por Raúl Barrera Rodríguez y José María García Guerrero, responsable y colaborador, del Programa de Arqueología Urbana (PAU), respectivamente. Las excavaciones dieron como resultado el hallazgo de pisos de lajas de basalto, los cuales debieron integrar parte de un espacio abierto del Palacio de Axayácatl. Asimismo, del periodo virreinal temprano (1521-1620 d.C.), se registraron los restos de una casa ordenada por Cortés. Ese espacio, el cual habitó el español por algunos años.

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