Itzania Otero Manzo es directora de la Unidad de Policía Metropolitana Femenil y la encargada de coordinar las acciones del cuerpo de Ateneas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) durante las manifestaciones feministas.

Han sido más de 2 mil mujeres policías quienes han estado bajo su cargo en cada manifestación feminista de la Ciudad de México (CDMX), en donde no sólo deben salvaguardar la seguridad de las asistentes, sino de ellas mismas.

Otero cursa un doctorado en seguridad ciudadana, lo que la lleva a mantener una capacitación constante, pues entiende que un policía toma decisiones de riesgo constantemente.

La Jefa Atenea lleva 10 años al frente de la Policía Metropolitana femenil sirviendo a la ciudadanía a través de la capacitación de sus compañeras en derechos humanos y técnicas de contención.

En su labor, lleva a cabo actividades para que los demás elementos sepan cómo actuar en una manifestación, pues hacerlo de forma correcta puede garantizar su seguridad.

Con ejercicios que incluyen prácticas como caminar con los ojos vendados, Otero busca que los elementos se concentren en cualquier disturbio y así, mantengan la calma.

En las movilizaciones sociales, lo que se busca es evitar caer en confrontaciones y que en consecuencia, que haya afectaciones materiales o físicas, así como controlar y contener a los grupos de choque.

Asimismo, se busca garantizar la libre manifestación y tránsito, pues la idea es proteger a las mujeres que participan durante estos eventos.

El agrupamiento Ateneas está conformado por mujeres que a través de su trabajo buscan hacer la diferencia en la CDMX y ser un modelo a seguir para quienes pertenezcan a alguna corporación policiaca.

En entrevista para Milenio, Itzania Otero explicó la visión que se tiene actualmente sobre el agrupamiento: “Un reto, como mujer, como mujer policía y más que no enfrentamos a cambios, cambios constantes; se nos ha volteado a ver como grupo, como mujeres con una capacidad de reacción.”

Por otra parte, en cuanto al uso de extintores que ha causado gran controversia en cada movilización social, Otero aseguró que es una manera de evitar más agresiones, al buscar que quienes ejercen violencia directa se detengan y se recupere la distancia.

Itzania Otero Manzo ha sido testigo cómo compañeras denuncian abusos y acoso por parte de mandos y compañeros, también de las exigencias de mejores oportunidades de crecimiento y desempeño equitativo en distintas áreas.

Este resultado es gracias a la Unidad Especializada de Género de la policía, creada en 2019, la cual ha iniciado 397 carpetas de investigación administrativa por abusos y delitos cometidos contra las agentes.

“No es fácil, nosotras también vivimos un movimiento feminista dentro de la policía, y también afuera, en nuestra vida cotidiana. Nada más que la diferencia, ahora, es que podemos tener un apoyo que nos escucha y que nos resuelve”, dijo la Jefa Atenea en entrevista con el portal Excélsior.

Más del 99% de las quejas interpuestas en la Unidad de Género (394) han derivado en denuncias penales ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, donde fueron acreditadas cuatro violaciones y se han girado órdenes de aprehensión contra superiores jerárquicos que atacaron a sus subalternas.

La agresión social persisten dentro de la SSC, comentó Samery Yedith Jasso Tapia, subdirectora de supervisión operativa de la Unidad de Género.

Con base en sus reportes, las agresiones por cuestiones de género contra mujeres policías no sólo es perpetrada por sus mandos, sino por sus propios compañeros, y en al menos 11 casos, el acoso sexual terminó en una violación.

“Se aprovechan del cargo que ellos tienen para violentarlas, cuando son de igual rango deriva una situación sentimental y de ahí deriva una violencia familiar”, expuso Jasso Tapia.

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