La Arquidiócesis Primada de México invitó a todos los párrocos, rectores de templos, capellanes, y fieles laicos a celebrar simbólicamente los 200 años de la entrada del Ejercito Trigarante, hecho que consumó la independencia de México.

En comunicado de prensa, se detalló que la propuesta para celebrar el bicentenario de este hecho histórico es que suenen las campanas de todos los recintos católicos a las 20:30 horas “como muestra de júbilo y agradecimiento a Dios por la vida independiente en nuestro país”.

Asimismo, se sugirió que las comunidades realicen algún acto de culto o de piedad con el que se “agradezca a Dios” por la posibilidad de encontrarse en un país que nació a partir de la fe.

En el comunicado, también se menciona que la celebración conmemorativa tiene que ver con el aniversario 125 de la coronación de la Sagrada Imagen de la Santísima Madre Santa María de Guadalupe, la cual fue elegida por Miguel Hidalgo y Costilla como “emblema de protección e intercesión de la nación mexicana”.

La invitación a realizar esta es una manera de unirse a las celebraciones del Gobierno de la Ciudad de México (CDMX) por el bicentenario de la consumación del evento histórico que convirtió al país en un estado independiente de la monarquía de los españoles en el siglo XIX.

El comunicado de la Arquidiócesis concluyó con “roguemos a Dios nuestro señor, que bajo la intercesión de Santa María de Guadalupe protectora y garantía de unión de nuestro México independiente, nos bendiga como nación para que sigamos construyendo, con honestidad y fraternidad, una patria libre, donde la esperanza, la fe y la unidad sean los valores que nos guien”.

Históricamente, la religión se ha encontrado en constante relación con el proceso de la guerra de independencia, siendo Miguel Hidalgo quien directamente la usara como símbolo dentro del movimiento.

De acuerdo con el portal Desde la Fe, “al iniciarse la Guerra de Independencia, el cura Miguel Hidalgo enarboló como estandarte un lienzo con la imagen de la Virgen de Guadalupe que tomó de la sacristía del santuario de Atotonilco, Guanajuato, y esta idea del caudillo provocó gran entusiasmo entre sus seguidores, ya que la imagen representaba, en cierto modo, la nacionalidad mexicana”.

La imagen de la virgen también fue usada en otros dos movimientos bélicos que hubo en México: la revolución mexicana —era el ejercito zapatista en 1910 quien ocupaba a la llamada “patrona de México”— y en la guerra Cristera.

La Arquidiócesis Primada de México es la organización religiosa que lanzó el comunicado, identificándose como “una porción de la Iglesia Católica, cuyo pueblo de Dios peregrina en una gran parte de la Ciudad de México”.

Según información de su portal, “está conformada por siete zonas pastorales y cuenta con 632 templos en total. Es considerada una de las más grandes del mundo por el número de personas que se declaran católicas”.

Esta iglesia particular fue creada el 02 de septiembre de 1530 y elevada a Metropolitana el 12 de febrero de 1546. Su ocupación en la actualidad es gran parte del territorio de la Ciudad de México, que comparte con las diócesis de Xochimilco, Iztapalapa y Azcapotzalco.

“Los fieles laicos, las religiosas, los religiosos, los diáconos y los presbíteros, todos en unidad y comunión con el Arzobispo, y bajo el amparo de Santa María de Guadalupe, formamos una Iglesia local, pero que a su vez es signo y realización concreta de la Iglesia Universal, que es Una, Santa, Católica y Apostólica” comenta la organización.

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