A pesar de que en el Atlas Nacional de Riesgos aparece la zona del Cerro del Chiquihuite, en el Estado de México, como de alto peligro por “inestabilidad de laderas”, la Coordinación Municipal de Protección Civil (PC) del Gobierno de Tlalnepantla descartó que hayan tenido un mal diagnóstico sobre los reportes que hicieron vecinos de la colonia Lázaro Cárdenas, días antes de la tragedia del pasado 10 de septiembre.
Así lo aseguró la tarde de este jueves Hugo Mendoza, coordinador de PC de Tlalnepantla, en entrevista con Denise Maerker en Radio Fórmula, luego de que fue cuestionado sobre el testimonio de la dueña de una de las casas que quedaron sepultadas por el deslave de rocas gigantes: “Me cansé de estar reportando (caída de pedruscos) y nunca hicieron nada”, dijo la afectada.
“Claro que no. Hablar de un error por parte de Protección Civil no es conveniente. Efectivamente, la señora que reportó nosotros la atendimos. Sin embargo, nosotros le hicimos la recomendación de que estaba cayendo material, no sólo en esa vivienda sino en las tres secciones de la colonia que han tenido afectaciones por la cantidad de lluvias”
Incluso, indicó que no había ningún tipo de contención ni una zona de amortiguamiento en las construcciones del lado de las laderas, lo cual se notificó tanto a las viviendas de la zona como al gobierno municipal a través de un dictamen de riesgo.
No obstante, solo se quedaron con la constatación, pues no realizó una acción más determinante como la evacuación de los vecinos y sólo se limitó en una “recomendación”.
“La recomendación fue que estaban en un riesgo inminente por la caída”
Cabe mencionar que cuando la periodista le preguntó al coordinador de PC de Tlalnepantla la fecha de dichos dictámenes de riesgo, “se le fue” la señal telefónica.
Hace unos días, el Ing. Carlos Valdés, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, explicó al mismo medio que la zona siniestrada ya era inhabitable debido a que no hay nada que pueda contener la caída de pedruscos del tamaño de una casa de dos pisos.
“No hay muro que la pueda contener. Para fragmentos más pequeños hay mallas que son elásticas y de acero”
Ante este panorama, Carlos Valdés mencionó que es importante para las personas que buscan una vivienda en zonas a lado de laderas tomar decisiones de carácter preventivo: “¿Me conviene estar en este lugar? ¿Es mucho el peligro?”.
Luego de seis días de arduas labores de rescate, se tiene un saldo de una persona encontrada con vida, dos muertos y dos desaparecidos.
Este 14 de septiembre, autoridades del Estado de México informaron la localización del cuerpo sin vida de Mía “M”, de tres años de edad, hija de Paola Campos Robles, de 22 años, y hermana de Dilan, de cinco, quienes permanecen bajo los escombros.
Según los estándares internacionales de la ONU, en búsqueda y rescate de personas atrapadas después de las 72 horas del colapso, que se cumplieron el lunes a las 14:00 horas, es muy difícil encontrar personas con vida.
A pesar de los pronósticos, Jorge, padre de Mía, y quien se encontraba trabajando en el momento de la tragedia, declaró este jueves entre lagrimas ante los medios que mantiene la esperanza de al menos recuperar sus cuerpos.
“Donde encontraron uno, debe estar el otro, estamos con Díos y le pedimos mucho para que salgan y despedirlos como se merecen”
Personal de la Marina, del Ejército y de Protección Civil continuarán buscando los cuerpos de sus familiares.
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