Un día después del altercado que se suscitó a las afueras del Congreso de la Ciudad de México, la presidenta de la Mesa Directiva, Patricia Báez, salió en su defensa para desmentir que ella no fue la que pidió el operativo en el que salió golpeada la alcaldesa electa de Álvaro Obregón, Lía Limón García.
Por medio de un video que compartió en sus redes sociales, la militante del Partido Acción Nacional (PAN) aseveró que en su calidad de presidenta pidió la presencia de elementos policiacos, “como cada que se realiza un evento”; sin embargo, informó que no solicitó un operativo ni tampoco más de 500 policías.
“Desde la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México solicitamos, como se ha hecho siempre, el apoyo de la autoridad para garantizar la integridad del recinto, representantes y personal que labora en él. Lo que no se solicitó, en ningún momento, fue un operativo de la magnitud que se vio”, expresó.
“No se solicitó, en ningún momento, el bloqueo de las calles del Centro Histórico. No se solicitó, en ningún momento, el repliegue violento a las alcaldesas y alcaldes electos, ni el bloqueo a ningún ciudadano”, continúo.
Asimismo, señaló que ya pidió formalmente a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, toda la información correspondiente sobre el operativo y lo sucedido en la calle de Donceles, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Por último, “condenó enérgicamente el abuso en el uso de la fuerza pública” y la falta de diálogo del gobierno capitalino con las y los alcaldes electos.
“Expreso mi solidaridad con Lía Limón, Sandra Cuevas, Mauricio Tabe y Santiago Taboada, alcaldes electos, quienes de manera directa sufrieron agresiones por parte del gobierno”, concluyó.
Conviene recordar que después de los hechos, comenzó a circular en redes sociales el oficio que dirigió Patricia Báez Guerrero a Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, para solicitar elementos policiacos en las inmediaciones de recinto legislativo.
Con lo cual personajes cercanos al gobierno capitalino, como Citlalli Hernández Mora, señaló que los representantes del PAN CDMX “sabían a lo que iban”, ya que solicitaron con antelación la presencia de policías e iniciaron el “acto de provocación”.
“Este es el doble juego del @PAN_CDMX: amenazan a trabajadores de las alcaldías con despedirlos si no acuden al acto de provocación que premeditadamente organizaron. Luego, ellos mismos son quienes solicitaron la presencia policíaca; sabían lo que iba”, redactó la secretaria general del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Sin embargo, ante la defensa que Báez Guerrero publicó, el alcalde electo de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe Echarte, reconoció el valor y la labor que la presidenta de la Mesa Directiva ha realizado a lo largo de las tres legislaturas en el Congreso de la Ciudad de México.
De igual forma, lamentó que el gobierno capitalino la haya querido utilizar de “chivo expiatorio”: “mi reconocimiento a tu labor, estimada @patybaezg. Lamentable que el @GobCDMX haya intentado responsabilizarte por su reacción violenta en contra de quienes integramos la @UNACDMX_Oficial”.
Asimismo, Andrés Atayde, dirigente estatal del PAN, volvió a condenar los hechos y señaló que el gobierno de la capital solo reacciona con golpes, mientras la oposición buscaba diálogo.
“Una auténtica pena que la CDMX se dé a conocer en el país y en el mundo como una donde su gobierno ataca físicamente a los gobiernos de oposición. La @UNACDMX buscaba diálogo. El @GobCDMX contestó con golpes. Así las cosas en la capital del país”, escribió en su cuenta de Twitter.
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