Después del ataque a la alcaldesa electa de Álvaro Obregón, Lía Limón García, en su camino hacia el congreso capitalino, los partidos opositores demandaron la renuncia inmediata del secretario de Gobierno, Martí Batres, y una disculpa pública de parte de Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
No obstante, esta tarde, al ser cuestionada durante su habitual conferencia de prensa respecto al tema, la mandataria capitalina aseguró que no pediría renunciar a Batres, pues consideró que “no podemos hacer de la política un circo”, asegurando que su administración siempre ha estado dispuesta al diálogo.
Primeramente, condenó la agresión que sufrió la alcaldesa electa y dijo que se tenía que realizar una investigación respecto a lo ocurrido para analizar exactamente qué pasó.
Por otro lado, se cuestionó la falta de solicitud de acceso vía telefónica si prácticamente todos los diputados y diputadas ingresaron al recinto. También “por qué no se buscó al secretario de gobierno que en ese momento estaba reunido con los coordinadores parlamentarios de los distintos partidos políticos para decir ‘queremos entrar al congreso’. Esa parte es la que no me explico”, comentó.
“Lo que sí me extraña, la verdad, es por qué no se llama y se dice: ‘¿Por dónde entramos, cuál es la calle en la que debemos entrar? Hay diputados, hay alcaldes, alcaldesas’, en fin, no, esa parte no la entiendo, pero más allá de eso y que en todo caso tiene que investigarse”, agregó.
Recordó que fue la presidenta de la Mesa Directiva quien pidió la presencia policial y que ya están citados la esta y la otra semana para acudir de “uno en uno” y abordar problemáticas particulares de cada alcaldía.
“No se puede hacer de la política un circo, ellos están llamados a una mesa de trabajo conmigo, uno a uno. La política no es un circo, gobernar significa un gran esfuerzo dedicado a los ciudadanos, a los habitantes de nuestra Ciudad de México (...) el tema central aquí es que pues hay que dedicarse a gobernar, ellos ya van a entrar en un mes”, dijo.
Sheinbaum Pardo dio como ejemplo el acercamiento que tuvo con el alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada, cuando hubo una explosión en un edificio de la demarcación y trabajaron juntos a pesar de los diferentes partidos que representan.
Cabe recordar que el día de ayer, después del ataque a Limón, Batres descartó que se tratara de una agresión por parte de la administración capitalina.
En conferencia de prensa, el funcionario aseguró que fue a “solicitud de Ana Patricia Báez Guerrero (PAN), presidenta de la Mesa Directiva, (quien) pidió la presencia de la fuerza pública fuera del recinto legislativo”.
“De ninguna manera el gobierno daría ninguna orden para agredir a nadie, a ninguna persona, por más que manifieste otros puntos de vista críticos, eso corresponde a otras épocas”, declaró.
Además, relató que en el momento de la agresión, él se encontraba reunido con los coordinadores parlamentarios de los grupos de oposición, por lo que “no había necesidad de ningún forcejeo (con quienes resguardaban el Congreso capitalino), bastaba con una llamada que nos hicieran, ya sea a mí o a alguno de los coordinadores (para poder acceder al sitio)”.
Detalló que en tal reunión participaron los diputados Christian Von Roehrich, Tonatiuh González y Victor Hugo Lobo, de la oposición parlamentaria. “Nos extraña mucho esta situación. Yo he recibido a todos los que han querido, he recibido a alcaldes del PRI, del PAN, de todas las fuerzas políticas en reuniones preliminares previas”, dijo Batres.
SEGUIR LEYENDO