El presidente, Andrés Manuel López Obrador, envió sus condolencias a familiares de las cinco víctimas mortales que dejó la explosión en la plataforma petrolera Ku-Maloob-Zaap frente al estado Campeche, el pasado domingo, 22 de agosto.
“Quiero enviar mi más profundo pésame a los trabajadores de los petroleros que perdieron la vida el domingo en el mar de Campeche en un accidente lamentable. Van a contar con todo nuestro apoyo, los familiares de las víctimas y esperemos que se recuperen los heridas y las personas que están desaparecidas todavía (...) Es algo muy triste, muy lamentable”, expresó en la conferencia matutina.
El mandatario reconoció la labor de los trabajadores petroleros por impulsar una de las actividades prioritarias en la economía mexicana, la cual, comentó, “conlleva muchos riesgos”.
“La actividad petrolera es una actividad muy riesgosa (...) Por eso nuestro reconocimiento a todos los trabajadores petroleros y abrazo a las víctimas”, dijo.
Este lunes, el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero, anunció que el saldo de las víctimas mortales del accidente den la plataforma petrolera ascendió a cinco muertos, seis personas más heridas (uno de ellos de gravedad) y otras dos desaparecidas.
Romero explicó que solo una de las personas que fallecieron era trabajador del Pemex, en tanto que las otras cuatro trabajaban para la empresa de servicios petroleros Cotemar.
Asimismo, aseveró que los fallecimientos se dieron mientras los trabajadores realizaban actividades de mantenimiento en la plataforma E-Ku-A2.
Refirió que las personas que perdieron la vida “desarrollaban actividades de mantenimiento preventivo y limpieza de líneas de los cabezales de succión y descarga de gas de los compresores de bombeo neumático” al momento de que inició el fuego.
Por otra parte, destacó que se continúa en la búsqueda del personal desaparecido, mientras que en la plataforma se realizan las investigaciones correspondientes para conocer cuáles fueron las causas del incidente el pasado 22 de agosto.
No obstante, insistió en descartar que la explosión se haya debido a falta de mantenimiento o recortes presupuestarios dedicados a esa actividad.
“No hay un problema de falta de inversión o de recursos. La industria petrolera es una empresa de riesgos. Hemos tenido accidentes numéricamente menores a años anteriores. Nada consuela la pérdida de vidas humanas. Pero no es un tema de falta de inversión como han querido señalar algunos medios, sino algo relacionado al riesgo implícito de la industria petrolera”, aseveró.
En ese sentido, lamentó que se difundiera esa versión en diversos medios desde la víspera, señalando que esa no fue la razón de los hechos y aclaró que, de cualquier manera, ese tipo de zonas, por llevar a cabo actividades petroleras, son propensas a sufrir este tipo de accidentes, sosteniendo que en esta ocasión la razón fue precisamente eso, el riesgo propio que conlleva esa actividad.
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