Bajo el cobijo de policías capitalinos y el retorno de viejos líderes criminales, el grupo delictivo La Unión Tepito busca recuperar la plazas perdidas en la Ciudad de México.
Las versiones indican que La Unión está recurriendo a su viejo conocido Pedro Ramírez Pérez, alias el Jamón, quien asumió el liderazgo de la organización en 2018 y fue detenido en mayo del año siguiente.
Los planes del grupo criminal fueron revelados a través de audios obtenidos por el diario mexicano El Universal, los cuales detallan que los bandos asentados en la capital del país pretenden crear un frente bajo el liderazgo del Jamón. Asimismo advierten que este sujeto estaría contactando como protectores a elementos policíacos.
Según han señalado, Pedro Ramírez Pérez —presuntamente traicionado por uno de sus colaboradores de la Unión— pretende que varios de los líderes del grupo criminal sean trasladados a penales de la Ciudad de México para facilitar los vínculos.
Pese a que el Jamón solía moverse con extrema cautela, en mayo de 2019, elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) lograron su captura, luego de instalarle un GPS en su vehículo. Durante su mandato, el Jamón había tendido una estela de sangre en las alcaldías Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza, Azcapotzalco, Gustavo A. Madero, Benito Juárez, Iztacalco, Iztapalapa, Álvaro Obregón, Cuajimalpa y Coyoacán, además en el Estado de México en Naucalpan y Atizapán.
Los constantes golpes a la estructura por parte del gobierno capitalino, dejaron sin una cabeza visible a La Unión. Sin embargo, estudiosos de este grupo criminal han advertido que varios de los líderes encarcelados siguen dando órdenes, tal es el caso de Óscar Andrés Flores, alias el Lunares.
Este hombre, conocido como uno de los cabecillas más sanguinarios de la organización, desde que era niño su familia se dedicó al robo de tráileres y a la venta de mercancía robada, pero cuando creció él pasó a la distribución de droga al mayoreo. El soborno de funcionarios, policías y jefes de sector le permitieron convertirse en una de las cabezas criminales más visibles del barrio.
Antes de su detención en febrero de 2020, Flores se hizo acompañar por una escolta de diez hombres y mediante drones estableció el flujo de movimientos en la Peralvillo y sus alrededores. El 20 de enero del año pasado, el Lunares fue detenido en un fraccionamiento del estado de Hidalgo. Hasta allá lo siguieron las autoridades que habían detectado su nueva guarida.
Documentos de Secretaría de Seguridad Ciudadana revelados por el periodista Héctor de Mauleón sustentan que el criminal sigue dando órdenes desde la cárcel, pero debido a su condición de confinado, delegó el mando entre varios de sus familiares: Brandon Alexis Flores, el Junior; Ramírez Alejandro Kuhliger Flores, el Tío; Dionisio Flores Valle, Nicho, y de Olga Lidia Ramírez Godínez.
Este grupo tomó el control de algunos sitios de las alcaldías Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Iztacalco, Benito Juárez, Coyoacán, Tlalpan, Miguel Hidalgo y Azcapotzalco. La captura de los operadores del Lunares llevaría más tarde y de manera inevitable a la división del cártel.
Trasciende que una de las facciones la opera Eduardo Ramírez Tiburcio, el Chori. Héctor de Mauleón asegura que la Unión Tepito ha estado en un proceso de atomización, por lo que ha recurrido a una serie de “alianzas estratégicas” para sobrevivir y mantener el control.
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