Gregorio Sandoval Hernández, Don Goyo, presunto líder del Cártel de Tláhuac, fue recapturado por policías de la Ciudad de México sin recurrir a previos trabajos de inteligencia para ubicarlo.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que este sujeto de 51 años cayó de nueva cuenta en manos de las autoridades casi por accidente. En mayo de 2020 había sido detenido y le seguían la pista desde 2019, de ahí que no queda claro cómo recobró su libertad si estaba identificado como un capo de importancia en el centro del país desde entonces.
Este 9 de agosto, agentes capitalinos realizaban patrullajes de prevención sobre la avenida Langosta de la colonia Del Mar, en Tláhuac, cuando notaron a tres personas que viajaban en un vehículo con placas de Guerrero y una de ellas manipulaba una bolsa con envoltorios de papel de diversos colores.
De modo que no se trató de un trabajo coordinado con la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, tampoco se requirió el apoyo de la Guardia Nacional ni de la Marina-Armada de México. Los efectivos al mando de Omar García Harfuch solo se percataron de una bolsa con papelitos coloridos.
Esa fue la justificación que llevó a los policías a acercarse a quienes ubicaron como sospechosos para descartar cualquier posible ilícito, según precisó el comunicado oficial.
Cuando las tres personas observaron que fuerzas de seguridad se aproximaban a ellos, el chofer quiso acelerar y salir huyendo. Pero rápidamente le cerraron el paso y descendieron Graciela López, de 49 años y Guadalupe Trigueros de 52, así como Don Goyo.
Fueron revisados y les localizaron un arma de fuego corta, dos bolsas con 59 envoltorios de papel de distintos colores con cocaína en piedra y un paquete envuelto con cinta canela que contenía aproximadamente 27 kilogramos marihuana.
Solo entonces cayeron en cuenta que estaban ante la presencia de Don Goyo, señalado como uno de los últimos cabecillas del Cártel de Tláhuac. No fue una orden de cateo ni para cumplir aseguramientos. Sucedió en una calle con policías que atinaron al objetivo criminal.
De acuerdo con las indagatorias, Don Goyo y Guadalupe Trigueros fueron detenidos por Delitos contra la salud y Portación de arma de fuego el año pasado.
Los registros indican que Gregorio Sandoval Hernández fue asegurado durante un cateo efectuado el 17 de mayo de 2020 en el sitio donde, en agosto de 2019, las autoridades detuvieron a su sobrino, Carlos Alejandro Mendoza Sandoval, el Cindy.
Mendoza Sandoval es esposo de Diana Karen Pérez Ramírez, la Princesa de Tláhuac, hija de Felipe de Jesús Pérez Luna, el Ojos, líder fundador de la agrupación y quien fue abatido por la Marina en 2017. El Cindy fue arrestado junto con su cuñada, la otra hija del Ojos, Liliana Pérez Ramírez, señalada como lideresa de la organización criminal.
Tras la caída de esos dos cabecillas, Don Goyo fue ubicado como operador de relevancia en el Cártel de Tláhuac. Sin embargo, cuando lo detuvieron hace un año solo pudieron mantenerlo siete meses en prisión y recobró su libertad en diciembre. En agosto de 2021 su captura es anunciada como un duro golpe, pero las mismas autoridades lo dejaron ir y volvió a sus actividades criminales.
Según los reportes de su perfil criminal de hace dos años, Don Goyo destacaba por no recurrir a métodos violentos para conservar el control del negocio de las drogas. Presuntamente, empleaba un “ejército” de “dealers” para la distribución de marihuana, cocaína en polvo y piedra, cristal y otras sustancias consideradas psicoadictivas.
En aquel entonces, la SSC capitalina informó que Gregorio Sandoval Hernández usaba principalmente a personas jóvenes cuyo método de distribución de la droga era a través de motocicletas, motonetas, mototaxis, taxis y vehículos particulares en alcaldías como Tláhuac, Tlalpan y Milpa Alta.
Se dedicaba al narcomenudeo, extorsión, cobro de piso, despojo y asesinatos en las colonias de Tláhuac de la Nopalera, Metropolitana, La Turba, Olivos, Del Mar, Miguel Hidalgo, Zapotitlán, La Conchita y La Estación.
Don Goyo comenzó su carrera en el narcotráfico junto el Ojos. Ambos son de Michoacán y trabajaron para la Familia Michoacana.
Después llegaron a la Ciudad de México y se aliaron con los Beltrán Leyva y la Mano con Ojos, pero estos grupos quedaron debilitados tras el arresto de sus dirigentes. Así fue como Felipe de Jesús Pérez Luna y Gregorio Sandoval Hernández se independizaron y conformaron el Cártel de Tláhuac.
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