A inicios de agosto, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) corrió por una crisis interna tras la destitución de su antes presidente, José Luis Vargas Valdez, y el nombramiento de Reyes Rodríguez Mondragón como el nuevo magistrado presidente.
El cambio de mando se decidió tras una sesión pública del pasado 4 de agosto en donde cinco de siete magistrados votaron por su salida de la directiva; esto luego que Vargas, acusado por enriquecimiento ilícito, se negara a renunciar.
Esta denuncia fungió como el componente que llevó al magistrado Felipe de la Mata a convocar dicha reunión para evaluar la gestión del ex presidente al frente del organismo.
Posteriormente, a pesar que se había convocado un receso en aras de “conservar el orden”, la decana y presidenta del TEPJF por ministerio de ley, Janine Otálora Malassis, llamó a la reanudación de las conversaciones - sin la presencia de Vargas Valdez, ni la de la magistrada Mónica Soto - para el sufragio que derivó en la salida de José Luis.
Luego de ello, Vargas Valdez se negó a renunciar a su cargo ya que, expresó, el actuar del Tribunal habría sido “nulo de pleno derecho”, por lo que el nombramiento de Rodríguez Mondragón representó “un ejercicio ilícito de funciones”.
“Somos jueces constitucionales y tenemos que actuar a la altura, los albazos no son la forma de resolver las diferencias”, expresó en un video.
Este argumento fue secundado por el político, Diego Fernández de Cevallos, en su columna para Milenio, en donde reprobó la decisiva de los magistrados por ser “sin sustento constitucional ni legal”; en otras palabras, hicieron “lo que les vino en gana”.
Subrayó que la naturaleza autónoma del órgano no los coloca por encima de la ley, por lo que descalificó la sesión “arbitraria”, así como la resolución cimentada, dijo, en la “falacia” ideología de “quien puede lo más puede lo menos”.
Debido al cambio de presidencia del Tribunal, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, insistió en la necesidad de una reforma al Instituto Nacional Electoral (INE) y al TEPJF pues, comentó, esto refleja el “nivel de descomposición” que invade al máximo órgano electoral.
“Esto ayuda a comprender el nivel de descomposición que existe en este organismo, en esta institución; el por qué de una reforma (...) Y luego lo que cuestan, ganan como dos o tres veces más que yo. Es un pendiente del antiguo régimen autoritario corrupcto que se heredó”, señaló.
Por esa razón, Fernández de Cevallos advirtió en su escrito que esta “disfuncionalidad” representa un “rico manjar” para el Jefe del Ejecutivo quien, comentó, “tratará de hacer con él lo que quiera, apoyado en su mayoría de legisladores abyectos”.
José Luis Vargas fue designado magistrado Electoral de la Sala Superior del TEPJF el 4 de noviembre del 2016, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018),
A su puesto como presidente de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), accedió en noviembre de 2020, donde fue elegido con cuatro votos a favor, superando al magistrado Reyes Rodríguez que solo obtuvo tres.
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