Este jueves, el narco volvió a atacar en Nayarit, un estado en la costa del Pacífico mexicano. De acuerdo con los reportes, elementos de la Guardia Nacional se enfrentaron a balazos con presuntos sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), a la entrada de la cabecera municipal de Santiago Ixcuintla.
El choque inició luego de que los uniformados le marcaran el alto a un vehículo compacto. Los ocupantes no se detuvieron, lo que provocó una persecución. Según los detalles, los elementos acorralaron a los presuntos pistoleros luego de 20 minutos de una intensa balacera. Al menos cuatro delincuentes resultaron heridos.
En marzo pasado ocurrió una situación similar en el municipio de Compostela (Nayarit), donde fue detenido Erick Joel del Toro López, el M3, presunto lugarteniente del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Este sujeto fue detenido luego de un operativo en que se desplegaron helicópteros Black Hawck, así como diversos elementos en tierra, incluidos efectivos de la Guardia Nacional, policías municipales y estatales.
En Santiago Ixcuintla, localizado al norte de Nayarit, mantiene su base de operaciones la organización criminal liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho. El año pasado, un informe de la Secretaría de Gobernación reportó que el Cártel Jalisco realizó el cobro de impuestos, durante el auge de la pandemia por COVID−19.
En 2017, este poblado se convirtió en zona de guerra, luego de que el CJNG le disputara el territorio al cártel de los Beltrán Leyva. El rompimiento de esta última organización con Joaquín el Chapo Guzmán —quien entonces dirigía el Cártel de Sinaloa— les abrió la oportunidad a los jaliscienses de entrar a Nayarit.
El control que mantenían los hermanos Beltrán Leyva en el estado se fue mermando por la muerte y captura de sus miembros. Entonces, el liderazgo lo heredó una célula a su servicio identificada como Los Mazatlecos, de Fausto Isidro Meza Flores, el Chapito Isidro.
Los Mazatlecos dominaban Nayarit y peleaban por el control del sur de Sinaloa, sobre todo del puerto de Mazatlán.
Debajo de la posición del Chapito Isidro se encontraba un capo sanguinario y temible: Francisco Patrón, alias el H2, quien junto con su banda eran objetivos prioritarios del gobierno federal.
Hace cuatro años, las autoridades iniciaron un operativo para capturar al H2. Comenzaron acorralándolo en un domicilio en Tepic, capital de Nayarit. Al verse rodeado sus escoltas respondieron a balazos y lanzando granadas. El inmueble fue ametrallado desde el aire, dejando al criminal abatido y con el rostro ensangrentado.
La posición geográfica de Nayarit lo ha vuelto un paso imprescindible en el tráfico de drogas, sobre todo porque se localiza entre Jalisco y Sinaloa, de donde son dos de los grupos del narcotráfico más importantes de las últimas décadas.
En octubre y noviembre del año pasado, el Operativo MZ se mostró como un grupo encargado de combatir la expansión del CJNG, en Nayarit. Mediante un breve video, unos 20 sicarios fuertemente armados y con el rostro cubierto hicieron el anuncio de que ya se encontraban en esa entidad mexicana y que realizarían una limpia, incluso con amenazas al secretario de Seguridad.
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